EEUU confirma la realización de un plebiscito en Puerto Rico

El presidente norteamericano Jimmy Carter dio ayer luz verde a la celebración de un plebiscito en Puerto Rico para determinar si esta isla del Caribe desea su anexión a Estados Unidos.

En una proclama dirigida al pueblo puertorriqueño, Carter prometió respetar la decisión final de los 3.500.000 puertorriqueños en el plebiscito que tendrá lugar a principios de la década de 1980 aunque ésta sea la de independencia nacional.

Pero según el gobernador Carlos Romero Barceló, que ayer vaticinó que la mayoría de los Puertorriquenos respaldarán la anexión de Puerto Rico como el 51 estado a la federación norteamericana, Carter dio en su proclama su apoyo a la estatidad puertorriqueña al proineter apoyarla ante el Congreso de Estados Unidos.

En el último plebiscito celebrado en Puerto Rico, en julio de 1967, el 60% del electorado apoyó al actual régimen de Gobierno autónomo un 39% favoreció la anexión de Puerto Rico como estado federal a Estados Unidos, y un 1 % favoreció la independencia.

Pero desde la llegada al poder, en 1976, del actual Gobierno proanexionista la campaña oficial tiene como objetivo llevar a Puerto Rico a formar parte integrante de Estados Unidos.

El gobernador Romero Barceló, principal promotor de este cambio de status en la isla, aseguró ayer que el actual Gobierno autónomo constituye un «estado de adolescencia política», e indicó que había «servido bien mientras el pueblo puertorriqueño se iba sobreponiendo a problemas sociales y económicos que entorpecían nuestra participación efectiva en la nación».

Oposición del Congreso

A pesar de las aflirmaciones de Carter, los observadores independientes creen que el Congreso norteamericano difícilmente aceptaría la entrada de Puerto Rico como estado de la Unión, por razones culturales. económicas y, sobre todo, políticas.Los 3.500.000 puertorriqueños que viven en la isla mantienen arraigada su cultura española y su individualidad como pueblo, además de no hablar el idioma inglés.

Por otra parte, supondrían una pesada carga económica para el tesoro de Estados Unidos, del orden de los 8.000 millones de dólares anuales, según ciertos expertos, y para colmo tendrían una representación mayor en el Congreso que la mitad de los estados norteamericanos.

El gobernador Romero Barceló ha amenazado, sin embargo, a Estados Unidos con declarar la independencia si no aceptan a Puerto Rico como estado federado.

En la proclama del presidente Carter se mencionó también ayer quese cumplía el 80 aniversario de la presencia de la bandera norteamericana en Puerto Rico, al aludir, sIn mencionarla, a la invasion por fuerzas estadounidenses de la isla, el 25 de julio de 1898. durante la guerra hispano-norteamericana.