El Athletic, imparable en San Mamés

El Athletic de Bilbao tiene prácticamente asegurado su paso a la final después del encuentro disputado en la noche de ayer en San Mamés, frente a la U.D. Salamanca. Un 6-0 en el marcador es lo bastante contundente que de no ocurrir algo verdaderamente insólito le impida acercarse hasta el Calderón el próximo día 25 del presente mes de junio.

Un Athletic como el de hoy hay que verlo en San Mamés para saber lo que es y hasta dónde puede llegar en esta competición copera. Su ritmo, su velocidad, ha ido in crescendo a lo largo de esta competición de la Copa del Rey, ya que se comenzó con un cuatro a cero en San Mamés al Elche; posteriormente fue un cinco para el Sevilla y ayer se estableció el seis para con la Unión Deportiva.

- Si de alguna forma hubiera que definir el partido, estimaríamos como muy propio el calificativo de festival «Rojo-Carlos». El extremo internacional bilbaíno hizo cuanto quiso y le vino en gana, poniendo constantes balones en los pies y cabeza de sus compañeros de línea, para que éstos batieran a Seoane, de forma que el portero charro nada pudiera hacer por detener los balones. Pero de entre todos los compañeros de línea, el que mayor provecho supo sacar de este magnífico juego de Rojo fue Carlos, que a pesar de todo tuvo en sus botas otro par de goles, uno tras jugada sensacional de Guisasola que puso al público en pie y otro a centro del propio Rojo, que si no llega a ser estorbado por Lasa, seguramente haría en estos momentos el séptimo tanto en el haber bilbaíno.

Sin ánimo de pecar de optimistas se puede decir que allí sólo existió un equipo: el Athletic de Bilbao Ese Athletic desmelenado, copero capaz de batir al enemigo más cualificado.

Ante esta tromba futbolística, Poco o casi nada le cupo hacer a un Salamanca -que salió con demasiadas precauciones defensivas Prueba de ello es que Juanjo lució el 9 a la espalda y su única misión consistió en marcar a Churruca.