Ningún grupo ha reivindicado el secuestro de Javier de Ibarra

Ningún grupo político ha reivindicado hasta la hora de redactar esta información -doce de la noche- el secuestro del financiero bilbaíno Javier de Ybarra secuestrado en su domicilio de Neguri, en Guecho, entre las 8.30 y las nueve de la mañana de ayer, por un comando formado al menos por seis personas y que todos los observadores coinciden en suponer que pertenece a la llamada rama militar de ETA. Tampoco han sido hallados los vehículos usados por los secuestradores, ni se ha facilitado información oficial sobre el caso.

Los secuestradores, armados y con la cara cubierta, penetraron en el domicilio del señor De Ybarra y maniataron a todos los miembros de la familia y del servicio. Los asaltantes -según ha declarado un hijo de la víctima- se comportaron en todo momento con gran corrección, hasta el punto de que utilizaron cuerdas recubiertas con guaté para maniatar a las mujeres.El secuestrado, según las mismas fuentes, se comportó con gran entereza y serenidad, y salió de su casa vestido con un traje, sin corbata y con abrigo y sombrero, tras pedir que le permitiesen llevar una biblia y un libro sobre temas vascos que estaba leyendo.

Los secuestradores advirtieron a los maniatados que no dieran aviso a la policía antes de las doce del mediodía. Poco antes de esa hora una hija del señor De Ybarra consiguió liberarse de sus ataduras y comunicó el suceso a las autoridades. Rápidamente se montó un amplio cerco en varios kilómetros a la redonda del lugar del acontecimiento, aunque fuentes policiales hicieron notar el gran lapso de tiempo transcurrido entre la hora del secuestro y el comienzo de esas operaciones.

Las mismas fuentes mostraron la sorpresa por esta acción, ya que esperaban acciones de tipo violento, como las de San Sebastián y Pamplona, pero no un secuestro.

El señor De Ybarra fue sacado de su casa por dos de los secuestradores que vestían batas blancas y huyeron en un coche Seat- 1430, blanco, que podía simular una furgoneta. El resto permaneció en la casa hasta casi las diez de la mañana.

La reacción de los medios políticos vascos ha sido de condena unánime. Desde la derecha hasta la extrema izquierda coinciden en afirmar que el secuestro introduce un factor de distorsión extremadamente grave en el momento político actual, y especialmente, por lo que se refiere a la situación del País Vasco, donde lentamente se operaba una cierta distensión tras los sangrientos sucesos de los últimos días.

El señor De Ybarra es presidente de la empresa Babcock Wilcox, consejero del Banco de Vizcaya y de Iberduero, así como presidente de Bilbao Editorial, que publica el diario El Correo Español-El Pueblo Vasco. Estos últimos meses, el señor De Ybarra viene prestando especial atención al periódico, sobre el que ejerce influencia directa.

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