Ir al contenido
_
_
_
_

El lamento de Xabi Alonso, igual que el de Carlo Ancelotti: “Nos faltó equilibrio”

El nuevo técnico del Real Madrid valora la reacción tras el descanso, pero admite los errores iniciales “con y sin balón”

Xabi Alonso durante una pausa de hidratación en el partido ante Al Hilal.
Lorenzo Calonge

“Esto es un proceso. Todo lleva su tiempo y su repetición para que cale un poco más. Queremos aprender”, concluyó Xabi Alonso tras una tarde de muchas dificultades y problemas conocidos para el Madrid. El nuevo técnico no ocultó el fútbol pedregoso de su equipo hasta el descanso y en sala de prensa volvieron a escucharse análisis similares a los de Carlo Ancelotti. “En la primera parte, perdíamos rápido el balón y no teníamos demasiado equilibrio. Son cosas que habíamos hablado”, apuntó. El equilibrio, otra vez el equilibrio. Quizá la palabra más utilizada entre agosto y mayo por Carletto apenas tardó unos segundos en salir de la boca del tolosarra.

“Al principio, nos han faltado muchas cosas, con y sin balón. No hubo buena circulación, queríamos jugar demasiado rápido, en la pérdida no ajustábamos y el partido se abría”, contó Alonso. “En la segunda mitad, le dimos otro sentido, tuvimos más control, mejor manejo de balón, mayor amplitud, jugadores entre líneas, posesiones más largas y equilibrio con la pelota. Pero nos faltó rematar. No ha sido suficiente, aunque sí mejor”, expuso el vasco.

Real Madrid RMA
1
Gonzalo García 33'
Al-Hilal ALH
1
Ruben Neves 40' (p)
Finalizado

Una progresión en la que tuvo su influencia Arda Güler, recurso tras el descanso en lugar de Asencio (mareado tras dos días con fiebre), igual que en las últimas semanas de Ancelotti. Problemas similares y alivios idénticos. El turco, mientras fue inmune al bochorno, ayudó a que los blancos tuvieran mayor ligazón. En un Madrid más incisivo a la vuelta del descanso, el joven se ubicó en el medio y, rodeado de compañeros poco dotados y animados para la construcción, contribuyó durante media hora a unir las piezas a través del pase frente a un rival al que ya le costaba presionar. Fue el recurso que mejor le funcionó a Xabi Alonso después de un inicio que siguió por la senda gris tan trillada de los blancos.

Con apenas tres entrenamientos para darse los buenos días en Estados Unidos, el paisaje del Madrid durante la primera mitad resultó un calco al que dejó Ancelotti. Los problemas se repetían. Dificultades para recuperar la pelota, distancia entre líneas, ritmo bajo y penurias para lograr una salida clara de balón, lo que complicaba que la pelota llegara franca a los atacantes. Todo sonaba a música vieja. Tchouameni no se ofrecía desde el pivote, y Valverde y Bellingham, unos metros por delante, hilvanaban poco. Trent Alexander-Arnold se metía por dentro, pero sus compañeros apenas lo encontraban. Así que, como en los meses precedentes, a menudo todo recaía en los centrales. Aquí, sin embargo, el Madrid sí parece haber encontrado una vía de socorro con Dean Huijsen, a la espera también del papel de Franco Mastantuono a partir de agosto en la maltrecha construcción del juego.

Fue una tarde para analizar cualquier movimiento de manos, ojos y pies de Xabi Alonso. Son los días de descifrar al nuevo técnico bajo la humedad de Miami. De arranque, su sistema fue un 4-3-3, el habitual de las últimas temporadas y no los tres centrales más dos carrileros del Leverkusen. Faltaba el griposo Kylian Mbappé (duda aún para el domingo) y apareció el canterano Gonzalo García, un nueve en lugar de un cuarto centrocampista. Volvió a jugar Rodrygo, que no lo hacía desde el 26 de abril. Y debutaron Trent Alexander-Arnold y Huijsen, algo que se daba por descontado con las bajas de Carvajal, Rüdiger, Militão, Mendy y Alaba, además, de Camavinga. Esa fue la presentación. El desarrolló tuvo bastante que ver con el Madrid que aterrizó en Estados Unidos.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Lorenzo Calonge
Licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra. Desde 2018, en la sección de Deportes de EL PAÍS y desde 2020, en la información del Real Madrid. También cubro balonmano.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_