Carmelo Ezpeleta, CEO de MotoGP: “Hay que llegar a más gente y contar mejor las historias del ‘paddock”

“Nunca es suficiente, pero es para estar contentos”, cuenta sin reservas Carmelo Ezpeleta Peidro (Barcelona, 78 años), al hacer balance de sus más de tres décadas ejerciendo como alcalde de MotoGP. El consejero delegado de Dorna Sports, la promotora española que desde 1992 explota los derechos comerciales del Mundial de motociclismo, atiende a EL PAÍS desde su oficina móvil dentro del paddock para valorar la venta del 84% del accionariado de la empresa a la multinacional estadounidense Liberty Media —también propietaria del Mundial de Fórmula 1— recién aprobada por la Comisión Europea. Durante su período al frente del certamen, la valoración de la compañía se ha catapultado hasta los 4.200 millones de euros, cuando a principios de los noventa estaba en los 100 millones de pesetas (1,6 millones de euros actuales, teniendo en cuenta la inflación).

“El balance es positivo, es evidente. A lo mejor se podría haber hecho mejor, pero la realidad es que en 1992 tuvimos 13 carreras y ahora organizamos 22, estamos en todo el mundo y hemos aumentado una barbaridad las cifras de audiencia en una época en que no todos los deportes han subido, creciendo en detrimento de otras disciplinas, quedándonos con una mayor parte del pastel”, señala el ejecutivo, que hasta esta temporada no se había perdido ni un solo gran premio desde su desembarco. Una operación de espalda cortó su racha de 562 carreras consecutivas en Silverstone, pero a las dos semanas ya había vuelto a la carga en Aragón y él asegura que la compra de Liberty no le jubilará todavía.

“Nosotros esperamos tener siempre el liderazgo de la compañía. Yo continúo como accionista en Dorna y de momento seguiré al frente, eso es lo que está hablado. Pero con la edad que tengo, está claro que no voy a estar aquí otra década”, comenta sobre los planes a corto plazo de los nuevos propietarios. “La principal diferencia respecto a otras ventas en el pasado es que los accionistas están ahora involucrados en el negocio, cuando antes eran solamente inversores financieros. Hablamos de una unión de gente que entiende de este tema, y Liberty nos aportará todo lo que sabe de este negocio, que conecta muy bien con lo que han hecho con la Fórmula 1 estos años”.

La llegada de los estadounidenses se hará notar nada más se confirme el cierre de la operación, que se espera para antes del 3 de julio. Chase Carey, antiguo CEO de la F1, y Sean Bratches, anterior director comercial de la máxima categoría del automovilismo, se unirán de inmediato a la junta directiva de Dorna junto a otros ejecutivos de la multinacional. La empresa española, tras la venta, mantiene una participación del 16% en las acciones.

Dorna tenía varias propuestas de compra encima de la mesa, pero eligieron Liberty al considerar que será la mejor para incrementar el volumen de negocio para todas las partes implicadas. “El objetivo número uno es llegar a más gente, y luego, como mínimo, mantener el nivel de interés deportivo que tiene el campeonato. Saber utilizar bien los nuevos medios a nuestro alcance y contar mejor todas las historias que hay dentro de este paddock”, señala el directivo. Como ya lo fue la eclosión de Valentino Rossi en su día, el renacimiento de Marc Márquez a los 32 años solo suma para el campeonato. “Es curioso, porque cuando ganaban 14 pilotos diferentes me decían que faltaba una figura, y ahora que uno domina, todo lo contrario. Yo creo que contar con un astro como Marc hace crecer al conjunto, pero nuestro departamento de marketing debe ser capaz de explotar tanto el poder de las estrellas como la igualdad competitiva”.

Ezpeleta podría estarse horas enumerando momentos clave para el desarrollo del campeonato del mundo en sus 33 años al frente del tinglado, pero para resumirlo mucho se queda con el salto de los 500cc a MotoGP y apunta ya al nuevo de reglamento que llegará en 2027. “Han sido cambios vitales, como también lo ha sido la evolución de la relación con los equipos y los fabricantes”, desgrana. Con más de una fábrica interesada en acceder al Mundial, y lista de espera para formar equipos, el crecimiento del deporte parece asegurado. La prioridad es ampliar la huella en Estados Unidos, América del Sur y Asia, y la asignatura pendiente es hacer subir a más pilotos de nacionalidades distintas, con los españoles e italianos ocupando hoy 15 de las 22 plazas de la parrilla.

“Los españoles a veces ni nos enteramos de lo que tenemos, pero el precio que Liberty Media ha pagado demuestra el interés que MotoGP genera alrededor del mundo”, suelta el ejecutivo al sopesar el valor de tener a una empresa nacional organizando el campeonato más relevante de la disciplina. Sobre otra de las críticas recurrentes que lleva años escuchando, el debate sobre las televisiones de pago, también se muestra contundente. “Si puedo pagar tres euros por una cerveza, ¿no puedo pagar nueve euros al mes para tener cuatro fines de semana de motociclismo? Es un problema de educación, y en el fútbol ya ni se discute”, concluye. Al contrario que sucedió en el caso de la F1, cuando Bernie Ecclestone abandonó el barco de inmediato, Ezpeleta seguirá al mando de las operaciones en MotoGP desde su oficina en Madrid.