Los Celtics sacan su orgullo de campeón sin Tatum y sobreviven ante los Knicks

Cuando todo estaba en contra, los campeones de la NBA apretaron los dientes, mostraron su orgullo y sobrevivieron al primero de los tres partidos en que se juegan su supervivencia. Los Celtics de Boston se impusieron en casa este miércoles a los New York Knicks (127-102) pese a la ausencia de su principal estrella, Jayson Tatum, que se rompió el tendón de Aquiles el lunes. Derrick White en la faceta anotadora y Luke Hornet en la defensiva dieron un paso al frente para mantener viva la eliminatoria. Pese a ello, los Celtics aún necesitarían ganar otros dos partidos para pasar a la final de la Conferencia Este.

Los Celtics tienen una plantilla completa, compensada y conjuntada. Aunque Tatum sea el principal anotador del equipo y su ausencia se haga notar, tienen talento entre el resto de los titulares y el mejor banquillo de la liga. A falta de Tatum, Jaylen Brown es la referencia del equipo. El número 7 de los locales, que fue mejor jugador de las finales del año pasado, logró 26 puntos, 12 asistencias y 8 rebotes. Sin embargo, quien lució este miércoles por encima del resto en la faceta ofensiva fue Derrick White. El escolta de 30 años sumó 34 puntos gracias sobre todo a una serie de siete triples en 13 intentos. Además, cargó de faltas al equipo rival y sumó otros 9 puntos desde la línea de tiros libres.

La otra gran sorpresa favorable del partido para los de Boston fueron las prestaciones de Luke Kornet. El pívot de 2,16 metros de altura, teórico tercero en la jerarquía del puesto, por detrás del letón Kristaps Porziņģis y el dominicano Al Horford, se convirtió en un muro defensivo con sus siete tapones y su efecto intimidador sobre el ataque rival. A eso sumó 10 puntos y nueve rebotes. El técnico de los Celtics, Joe Mazzulla, decidió mantenerle sobre la pista la mayor parte del partido en detrimento de un Porziņģis que lleva toda la postemporada muy por debajo de su nivel.

Kornet fue el hombre clave de una defensa mucho más intensa que en los anteriores partidos contra los Celtics. Salvo en el primer cuarto, que se cerró con ventaja visitante, los Celtics lograron parar a Jalen Brunson, la clave del juego de los Knicks, que acabó con 22 puntos y vio los últimos siete minutos del partido desde el banquillo, descalificado por sus faltas personales y, de paso, reservándose para el duelo del viernes, esta vez en el Madison Square Garden de Nueva York.

En el ataque de Boston destacó también Payton Pritchard, con sus 17 puntos, gracias a cinco triples. Jrue Holiday aportó 14 y Al Horford, otros 12. Los Celtics acabaron jugando sin Tatum su mejor partido de la semifinal de la Conferencia Este.

Tras un primer cuarto muy equilibrado, los Knicks tomaron una ventaja de nueve puntos a comienzos del segundo. Los locales se repusieron y el partido llegó al descanso con empate a 59 puntos. Fue en la reanudación cuando los de Boston pusieron tierra de por medio, gracias sobre todo a su agresiva defensa. Los Knicks anotaron solo 17 puntos en el tercer cuarto, con lo que los Celtics se escaparon por 15 tantos. A comienzos del último cuarto, la ventaja ya superaba los 20 puntos para alegría de los asistentes que abarrotaban el TD Garden, el mismo estadio donde los Celtics se proclamaron campeones hace un año y donde este miércoles dejaron claro que no van a rendirse fácilmente. Aunque les falte Tatum.