Emery: “Hoy tengo la misma confianza en mi equipo que antes del partido de París”

A ratos místico, en ocasiones indefinido y en otras trascendental, Unai Emery ofreció en la sala de prensa del Camp Nou una comparecencia sobria y sin grandilocuencia, evitando la epopeya o cualquier cosa fuera de lo normal para transmitir toda la tranquilidad posible a su equipo. Sabe que el Barcelona atacará del mismo modo que su PSG tiene una ventaja tan holgada (4-0 en París) que nunca antes en la historia un equipo remontó diferencia tan abultada. “Nuestra idea es jugar con personalidad contra un gran equipo, solamente pensando en la continuación de lo que hicimos allí sin pensar en el resultado”, resolvió.

Se habla de remonte azulgrana y de un ambiente eléctrico en el estadio, pero Emery hace oídos sordos. “Quizá la diferencia está en el ambiente, pero se juega en el terreno de juego. Y tenemos que mantener nuestra idea, jugar a lo que queremos proponer, gestionar nuestras emociones y las necesidades presentes”, convino. Pero el Barça no es un cualquiera y bien que lo sabe el técnico. “Si algo he aprendido en el fútbol que el respeto debe estar constantemente”, se arrancó; “pero ahora hay que reforzar más el respeto. En 90 minutos pueden pasar muchas cosas y debemos estar preparados desde el respeto y la confianza”. Precauciones que, sin embargo, maquilló: “La confianza que hoy tengo con mi equipo es la misma que antes del partido de París. Y el respeto que mantengo por el Barça también es el mismo”.

Consciente de que Luis Enrique últimamente ha puesto en práctica el 3-4-3 tan cruyffista – “pueden tener muchas variantes con los mismos jugadores en el terreno de juego, por lo que deberemos estar bien posicionados y trabajar mucho los duelos contra ellos”, expuso-, resolvió: “Independientemente del sistema, veo al Barça como un gran equipo con grandes jugadores”. Por eso, amplió: “Tendremos la necesidad de atacar y de sufrir todos juntos cuando sea necesario”. Para el partido, en cualquier caso, no podrá contar con los lesionados Guedes y Motta.