Thiago vuelve a tomar las riendas en el mediocampo

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Thiago Alcántara fue el líder del equipo más exitoso que ha dirigido Julen Lopetegui: la selección española que conquistó el Europeo sub-21 en Israel, en 2013. El mediocampista no solo mandaba en el campo, por clase y por carácter. Mandaba fuera, en donde oficiaba de interlocutor del seleccionador para organizar todo tipo de actos. La convivencia fue perfecta. Las barbacoas en la playa de Herzliya —Lopetegui es tan buen asador de carnes como entrenador— alternaban con partidos estupendos. Aquella distensión queda lejos. La exigencia se multiplica en la clasificación para el Mundial y el reencuentro del técnico con el futbolista presenta un panorama distinto. Thiago ya no es un número puesto. Solo ha jugado 45 minutos contra Liechtenstein y seis contra Italia. Esta noche contra Albania en Shkoder volverá a ser titular.

“Nos sorprende el fútbol de Albania”, dijo Thiago este sábado, solemnísimo. “El fútbol cada día está más igualado”.

El esquema (4-3-3) y la preponderancia que Lopetegui concede a Koke han devuelto a Thiago al lugar de los meritorios. La decisión de hacerle jugar de inicio puede condicionar el juego de España. El volante del Bayern, imprescindible para Ancelotti, posee cualidades que solo tienen Busquets, Iniesta y Silva. Su sentido del espacio y del ritmo le convierten en un futbolista ideal para jugar contra defensas que no dan tiempo a pensar porque es capaz de controlar el balón con seguridad, pasar con eficacia y ofrecerse rápido. Habilidades importantes para mantener el estilo que España exhibió en sus mejores años.

Koke vigilante

Lopetegui considera que Thiago es uno de sus jugadores de confianza. El centrocampista de 25 años ha encajado con serenidad su sustitución en el descanso ante Liechtenstein y su suplencia en Turín. Queda por ver cómo se acomoda al escalafón que se está formando en el mediocampo, en donde Busquets, Iniesta y Koke han sido los preferidos hasta ahora.

Koke no se destaca por la velocidad de Thiago para asociarse pero Lopetegui le aprecia por sus recorridos y su vocación en las vigilancias defensivas.