Karlovic, por la senda de Connors

No es difícil diferenciarle cuando camina por las instalaciones o por la zona exlusiva para los jugadores, el players. Ivo Karlovic es un tronco de 2,11 de altura y 104 kilos, y ayer, con 37 años, se dio un capricho al convertirse en el jugador más veterano que alcanza la tercera ronda de Roland Garros en los últimos 25 años. Antes, en 1991, lo hizo el legendario Jimmy Connors, que logró franquear la barrera con 38 años.

El gigantón de Zagreb, moldeado desde el banquillo por Petar Popovic, se batió ayer con el australiano Jordan Thompson durante cuatro horas y 31 minutos; eso, pese a su estructura, diseñada para encuentros mucho más breves. Pero no solo aguantó Karlovic, 28 en el listado de la ATP, sino que además sacó adelante un partido que además de kilométrico (6-7, 6-3, 7-6, 6-7 y 12-10).

El croata lo hizo a su manera, con 41 servicios directos. Por algo es el sacador más prolífico de la historia del tenis. Logró la plusmarca el 9 de octrubre del año pasado, cuando cayó frente a Pablo Cuevas en Pekín; ese día, con 26 aces, llegó a los 10.247 y superó a su compatriota Goran Ivanisevic, que cerró su carrera con 10.237.

En la ronda de treintaidosavos chocará nada más y nada menos que con Andy Murray, cuyo inicio de torneo está siendo una verdadera tortura. Ayer permaneció en la pista 3h 34m contra el francés Mathias Bourgue, hasta hacerse con el 6-2, 2-6, 4-6, 6-2 y 6-3 definitivo. El esocés acumula en sus dos primeros partidos 10 sets y un tiempo de estancia en pista más que considerable: siete horas y 15 minutos.