El lunar de Alves

El Espanyol lleva cinco partidos a cero en el Camp Nou. No gana desde que Lo Pelat se estrenó como cabeceador en la temporada 2008-2009. Hoy será de nuevo un exazulgrana de nombre Sergio García el que intentará someter a la zaga del Barça. El ariete es hoy el jugador que marca las diferencias en un equipo aún indefinido, difícil de calibrar, pendiente de los movimientos de su novel técnico Sergio González.

También el Barça está sobre todo a la expectativa del intervencionismo de Luis Enrique. El equipo presenta un agujero negro que tiene muy preocupada a su hinchada desde el partido de Mestalla. La alineación de Alves y Messi en la banda derecha provocó la inclusión como volante diestro de Busquets. Alves parece tan indispensable como Messi. No tiene recambio: Luis Enrique no confía en Montoya y la crítica la tiene tomada con Douglas. La cosa se ha puesto tan delicada que incluso no se descarta que de lateral pueda jugar Bartra si no lo hace Adriano. Alves, cuyo contrato acaba en junio, ha pasado de transferible en verano a titular en invierno, por más que su fiabilidad defensiva sea dudosa, déficit que se agrava cuando Messi también se va a la derecha para que Luis Suárez ejerza de 9. El técnico no encontró mejor solución en Valencia que sacrificar a Busquets.

Tiene el Barça cuatro laterales diestros y no le vale ninguno.