Casillas es un hueso duro

Horas antes de la final de la Eurocopa de 2012, en Kiev, Mari Carmen Fernández hizo un alto en su peregrinación con la caravana de La Roja para radiografiar al portero que mejor conoce. En realidad, era y es la mayor experta mundial, pues Mari Carmen es la madre de Casillas:

—Mira mis manos y mis muñecas. Son anchas. Yo soy de huesos gruesos. Iker también. Y además es ancho de hombros. Sus huesos son más pesados. Por eso necesita impulsarse más cuando salta, en las salidas por arriba. Él lo que tiene muy fuerte son las piernas. En los uno-contra-uno él se empuja con las piernas.

Efectivamente. En el minuto 23 del último clásico, con el Barcelona crecido y por delante (0-1), el portero se quedó mano a mano con Messi bajo los palos de la portería del fondo sur. Por un instante el Bernabéu se sumió en un silencio de cementerio. Un silencio tan profundo que cuando Messi golpeó el balón el toque se oyó en todo el anfiteatro: "¡Tac!". Un toque replicado casi de inmediato por otro: "¡Tac-tac!". Casillas dio dos pasos rápidos a la derecha y se estiró a tiempo de tapar la trayectoria de la pelota con la pierna. El balón se estrelló en su espinilla antes de desviarse. Pegó en hueso. El Madrid ganó el clásico (3-1), salió del pozo y alcanzó el liderato. Ahora todo el mundo es feliz. Incluso la multitud que se dedicó a pitar a Casillas desde agosto.

Desde El Madrigal, ha parado 24 de 26 remates y le han metido dos

Esta noche Casillas regresa al Bernabéu, en donde parte de los hinchas no ha dejado de cuestionarle en lo que va de temporada, incluso en el clásico, cuando le mencionaron por megafonía. Eso sí, los pitos son cada vez más aislados ante la evidencia de que no tienen sentido. "No creo que Casillas suponga un punto débil para la defensa del Madrid", dijo ayer Brendan Rodgers, el entrenador del Liverpool. "Tiene una calidad excepcional y lo ha demostrado durante años. Por algo Ancelotti lo ha elegido como el primer portero y sigue siendo el número uno en el Madrid. Con diferencia. No nos olvidemos que no le han metido ni un gol en cinco de los siete últimos partidos".

La evolución en la solidez de la defensa del Madrid no es tan evidente como la respuesta del portero. En los primeros ocho partidos que jugó en la temporada, incluyendo las Supercopas, recibió 29 remates entre los tres palos, paró 18 y le metieron once goles. En Villarreal cambió la historia: le tiraron cinco veces y las paró todas. Desde entonces ha disputado siete encuentros en los que le han hecho 26 remates, ha parado 24 y le han metido dos.

Si recibes un golpe y lo superas, construyen algo más sólido”, dice César

César Sánchez, que fue compañero de Casillas entre 2000 y 2005, observa que su colega se ha reforzado anímicamente: "A Iker le veo en un proceso de maduración. Tiene 33 años y por encima de los 30 las experiencias se valoran muchísimo más. Parece que lo has vivido todo, que estás preparado para todo, y recibes un golpe inesperado y, en gran medida, inexplicable. Buscas un sentido y muchas veces ni lo tiene. Si asumes tu punto de responsabilidad, si analizas lo que ha sucedido, estas situaciones te ayudan a madurar. Si lo superas, construyes algo más sólido. Entonces descubres que te sientes más seguro. Que eres mejor persona, mejor futbolista, y mejor profesional".

Entre enero de 2013 y agosto de 2014, Casillas dejó de ser el primer portero del Madrid. No perdía esta condición desde hacía más de diez años, precisamente cuando César Sánchez le arrebató la titularidad en la primavera de 2002. En esta temporada su entrenador, Carlo Ancelotti, decidió darle continuidad. Ha jugado 15 de los 16 partidos oficiales y, después de un turbulento periodo de pitadas y vacilaciones por fin se muestra más firme, más seguro.

"El debate se crea a raíz de Mourinho", observa Abel Resino, portero de referencia en la historia del Atlético. "Casillas siempre tendrá la espada de Damocles sobre la cabeza. Cuando las cosas no le salgan bien aparecerán sus detractores. Él ha sabido esperar. No se ha puesto nervioso y sus actuaciones han terminado dándole la razón. El Madrid empezó con muchas dudas. Ahora Casillas goza de la tranquilidad de jugar en un equipo impecable".

"Acostumbrado a ser un intocable", prosigue Abel, "que Mourinho y Ancelotti coincidieran en dejarle en el banquillo debió crearle tensión y nervios. No es lo mismo salir al campo con dudas que sintiéndote el mejor del mundo. Pero supo aguantar el tipo. Debe ser consciente de que el debate volverá. Pero tiene la veteranía a su favor. Esa experiencia le ayudará a mantener una estabilidad".