Muere electrocutado otro obrero en la construcción de un estadio

Muhammad-Ali Maciel Afonso, de 32 años, se convirtió el jueves en el octavo trabajador fallecido durante la construcción de los estadios para el Mundial de Brasil, que comienza dentro de cinco semanas. El operario trabajaba en la instalación de una red de telecomunicaciones en el estadio Arena Pantanal, en la ciudad de Cuiabá (capital del estado de Matto Grosso), una de las obras más retrasadas dentro de la carrera contrarreloj que vive el país para llegar a tiempo a la inauguración del Mundial y minimizar los consiguientes riesgos en seguridad. Maciel recibió una descarga eléctrica que le provocó una parada cardiaca; falleció en el lugar de los hechos, sin que los equipos de emergencia lograran reanimarle. El fallecido trabajaba para la compañía Etel Engenharia; las obras en el estadio fueron suspendidas a la espera de una investigación sobre el accidente.

La última muerte registrada en las obras de un estadio mundialista fue en São Paulo el pasado 29 de marzo. En el recinto de Cuiabá, que albergará cuatro partidos durante la Copa, ya se han disputado algunos encuentros entre equipos locales, pero se continúan agregando asientos, cableado y otros elementos.

El estadio sufrió un incendio parcial el pasado mes de octubre, cuyos daños (según las autoridades) ya han sido reparados. Las redes de telecomunicaciones (redes WI-FI y antenas de telefonía móvil) constituyen uno de los capítulos más peliagudos y demorados en la reforma de los estadios mundialistas, que ha sido duramente criticada por la FIFA en el último año.