Del Madison al calabozo

Las desgracias se les acumulan a los Knicks. Su base Raymond Felton fue arrestado el lunes por la noche poco después del partido ante los Mavericks (108-110), que concluyó con derrota del equipo de Nueva York tras una canasta de Nowitzki en el último segundo en el Madison Square Garden. Felton, el base-escolta titular, de 29 años, fue acusado de tenencia ilícita de armas. Su esposa, Ariane Felton, y el abogado que la representa en el proceso de divorcio, presentaron en una comisaria de Manhattan una pistola belga con 17 balas en el tambor y una en la recámara.

Ariane declaró que el arma es de Raymond y que ya no la quería ver más en su apartamento. También explicó que el jugador había exhibido cuatro veces la pistola de una manera agresiva ante ella, la más reciente el pasado 14 de febrero, aunque sin apuntarle. La legislación de Nueva York prevé una pena mínima de tres años y medio de prisión si el delito es tipificado como posesión de armas en segundo grado. Felton podría intentar un acuerdo con la fiscalía con la esperanza de obtener una sentencia menor. Pero si se declara culpable, la NBA prevé la suspensión del jugador de los Knicks. El equipo, además, podría rescindirle el contrato.

La única manera en que Felton puede eludir una grave pena por tenencia ilícita de armas es demostrar que la pistola belga en cuestión no le pertenece. Mientras se resuelve el contencioso, será difícil que pueda compaginar su situación con los partidos que disputen los Knicks.

El caso de Felton constituye una de las primeras piedras de toque para el nuevo comisionado de la NBA, Adam Silver. En 2010, su predecesor, David Stern, suspendió indefinidamente a Gilbert Arenas, alero de los Wizards de Washington y protagonista de un altercado en los vestuarios a raíz del cual se descubrió que guardaba cuatro pistolas en su taquilla. Arenas se declaró culpable de tenencia ilícita de armas y Stern le suspendiéndole durante el resto de la temporada.

Felton, que tiene contrato hasta la temporada 2015-2016 y percibe este año 2,6 millones de euros, está protagonizando una campaña muy discreta en la que promedia 10,4 puntos y seis asistencias. Recientemente, en un partido ante los Kings, quedó en evidencia. Durante un tiempo muerto, las cámaras de televisión le cazaron bostezando mientras su entrenador, Mike Woodson, impartía instrucciones.

Los Knicks rescindieron el pasado lunes los contratos de World Peace y Udrih. Su próximo desafío es intentar convencer a Carmelo Anthony para que haga efectiva la opción que tiene para renovar su contrato. La estrella del equipo ha dejado entrever varias veces su descontento por los decepcionantes resultados que sumen a los Knicks en una posición que no le permitiría en este momento disputar los playoffs.