Romaric se queda en tierra

Ya se le veía en la cara a Mauricio Pochettino que el retraso de hora y media con el que llegó Romaric al entrenamiento del Espanyol, el pasado miércoles, no sería algo de lo que se olvidase pronto. Por eso, decidió dejarlo fuera de la lista de convocados que ayer por la tarde viajaron a Valencia (22.00, La Sexta). "Hay unas normas de convivencia que están para cumplirlas y, sobre todo, para mantener la salud del equipo", argumentó Pochettino tras la última sesión preparatoria. "Por una cuestión o por otra, Romaric ha estado dos días sin entrenar con el grupo y por ello veremos si podemos contar con él para la semana que viene", añadió.

A pesar del falta de puntualidad del futbolista marfileño cedido por el Sevilla, Pochettino no se ensañó con el medio. "Todos podemos cometer este tipo de errores. Mi trato hacia él seguirá siendo el mismo que antes por el bien del grupo". El argentino quiso dejar atrás lo sucedido. "Yo he pasado página. Los dos hemos hablado mucho y lo que esperamos es que este tipo de situaciones no vuelvan a ocurrir porque pueden deteriorar nuestra fuerza grupal".

El castigo disciplinario de Romaric conllevará la modificación de un esquema en el que el centrocampista marfileño había adquirido un papel relevante. Es un contratiempo al que se han unido también las bajas de Javi Márquez y de Sergio García, que a pesar de las buenas sensaciones ofrecidas durante la semana, se quedaron fuera tras no recuperarse de sus lesiones. En su lugar repiten los canteranos Christian Alfonso y Cristian Gómez, a los que se ha unido el joven delantero del filial Bacari. "Un jugador potente, que no necesita de muchas oportunidades para marcar y que está realizando un muy buen trabajo", según le definió Pochettino.