Phelps, seis de seis

El nadador estadounidense, Michael Phelps, ha logrado su sexto metal en los mundiales de natación celebrados en Melbourne en una carrera marcada por la superioridad a priori de su compatriota Ian Crocker, quien se ha visto superado por cinco décimas. Sin embargo, el de Baltimore ha demostrado por qué es el favorito en los Campeonatos arañando centímetros cuando las corcheras de la piscina australiana se volvían rojas indicando el final. En 50,77s, Phelps muerde oro y se sitúa como el tercer nadador más rápido en los 100 metros mariposa. Por delante, el plusmarquista tiene ahora dos pruebas y una medalla pendiente para igualar la marca mítica de siete premios de Mark Spitz, y todo apunta a que el estadounidense superará el hito de los Juegos Olímpicos de Múnich de 1972.

Phelps se ha tenido que emplear a fondo para batir a su máximo adversario. Crocker venía de ganar en las dos últimas finales de Barcelona y Montreal, y aunque ha pasado primero por los 50 metros iniciales en tiempo de récord mundial, Phelps, que en ese momento era tercero, ha sabido atacar y eclipsar a su compañero.

La victoria del estadounidense, a pesar de la intratable trayectoria que sigue desde los comienzos del Campeonato, ha sido una sorpresa para el público, que esperaba más un nuevo récord de Crocker que una victoria del plusmarquista. La cara de incredulidad del campeón demostró que ni él mismo pensaba que le daba tiempo a recuperar la ventaja que le llevaba.

Crocker, al menos, conserva el récord del mundo, en 50.40, pero pierde el título que había ganador en los dos últimos mundiales, Barcelona'03 y Montreal'05. Phelps hizo 50.77 por 50.82 de Crocker y 51.82 del venezolano Albert Subirats, que dio a su país la primera medalla en unos mundiales. Sólo en 1986, Alberto Mestre había representado a Venezuela en una final de un mundial. Entonces fue séptimo en los 200 metros libre.