Arte con los ojos de un científico (y viceversa)

De todos los aspectos que el binomio ciencia y arte han podido compartir, sin duda el más recurrente y sugestivo es la utilización de la imagen. Las vinculaciones derivadas de cualquier diálogo figurativo entre distintas ramas de la ciencia -física, astronomía, química, biología y matemáticas- con el arte contemporáneo son mayoritariamente ricas en aproximaciones estéticas, conscientes de los peligros que contaminan el mundo visual, plagado de ambigüedades e ilusiones ópticas con los que la mirada se ha acostumbrado a operar. De la utilización y construcción de la imagen en ambos territorios parte el comisario Alberto Ruiz de Samaniego para articular este proyecto expositivo nacido del programa de investigación BALIZA (que forma parte de los proyectos de Campus de Excelencia Internacional de la Universidad de Vigo y que vincula el arte con el resto de disciplinas de la sociedad del conocimiento), donde se hace dialogar las obras de artistas docentes de la Facultad de BBAA de Pontevedra y de otros artistas invitados con trabajos y herramientas de diferentes científicos: aparatos, objetos, documentos y fundamentalmente imágenes obtenidas de distintas áreas de investigación que intentan dar explicación, entre otras, a la generación de formas (morfografías), al registro del tiempo (cronografías), a la captación de objetos no visibles (micrografías) o al análisis de espectros de frecuencias de un movimiento (espectrografías), hasta llegar a un total de siete bloques en los que se reparte el recorrido a modo de una constelación bien perfilada.

Resulta emocionante penetrar en el mundo del arte con los ojos de un científico y viceversa, acercarse a la ciencia desde el gesto artístico, concentrando el interés del recorrido en aquellos espacios o propuestas en los que se intenta romper la posición dominante de un terreno sobre el otro para dar paso a un relato fluido que implique la maravillosa subversión de convertir el arte en una herramienta para el conocimiento y la ciencia en un campo de expresión. Es el caso del vídeo Atlántico de Loreto Blanco Salgueiro, las fotografías Paralelo 45º25” Norte: Mongolia de Lola Marazuela y Paco Mesa, los distintos procesos de trabajo que Juan Loeck registra o la instalación Cuerpo-realidad de María Castellanos.

Una interesante colaboración entre artistas y científicos que, esperemos, pueda evolucionar en relaciones más profundas de trabajo, que trasciendan el diálogo casual que protagonizan muchos de los encuentros.

Campos de la imagen. Grafías de los hechos y del pensamiento. MARCO. Príncipe, 54. Vigo. Hasta el 12 de octubre.