El Méliès español

Georges Méliès fue un pionero del cine claramente genial, como se comprueba en la magnífica exposición que ahora ha recalado en Madrid tras haberse exhibido en Barcelona. No ha tenido esa suerte otro gran pionero del cinematógrafo, en este caso aragonés, Segundo de Chomón, que al igual que Méliès fue uno de los grandes inventores del cine. Sobre Méliès hasta Martin Scorsese realizó una película homenaje, La invención de Hugo, que descubrió a las nuevas generaciones el talento y la creatividad de quien hizo del cine un espectáculo de magia y fascinación. Sin embargo, del español Segundo de Chomón (1871-1929) poco o nada sabemos en su país de origen donde, como es tan habitual entre nosotros, no se le hizo demasiado caso, siendo más valorado en Francia, el país en que desarrolló sus increíbles inventos en clara competencia con Méliès. Hace un par de años el artista Roberto Lorenzo coordinó en Asturias una exposición sobre él, El alquimista impasible y su cine de fantasía, y en el Museu del Cinema de Girona se le rinde constante tributo, incluso con cursos para niños. (Sobre el origen del cine hay otra muestra exhibida actualmente en Almagro: la Linterna Mágica y muestras del extraño invento Cineflúo, (navegación simulada de Giorgio Busato), que se exhibió en Madrid nada menos que en 1908).

Pero volviendo a Segundo de Chomón, que llegó a realizar 500 películas, fundó la primera productora española e inventó formas de colorear las imágenes cinematográficas y de mover la cámara, y a quien se le deben efectos visuales en clásicos como Cabiria (1914) o Napoleón (1927), se han escrito unos pocos buenos libros, destacando los de J. Gabriel Tharrats (1988) y Minguet Batllori (2010). Recientemente se han editado en España dos DVD sobre la obra de Chomón, Le piano magique, con acompañamiento musical de Jordi Sabatés, y otro antológico sobre su trabajo El cine de la fantasía, francamente recomendable, donde puede admirarse buena parte de sus alucinantes creaciones. Aunque tarde, como siempre, al menos existe esta aproximación a la creatividad de un genio. Los inventores del cine no se acabaron con Méliès… que tuvo la suerte de ser francés.