Regresa la magia de Tim Burton con 'Charlie y la fábrica de chocolate'

Llega a España la última película de Tim Burton Charlie y la fábrica de chocolate. El filme es una adaptación de la obra del escritor irlandés Roald Dahl y supone el regreso al universo mágico del cine del director estadounidense. Tras la deliciosa Big Fish Burton vuelve a la fábula más pura, la que elevó a las cotas cinematográficas más altas con Eduardo Manostijeras, y lo hace con su actor fetiche, que en un principio iba para músico, Johnny Depp.

La película cuenta la historia de Charlie, un niño que vive junto a su familia con muy pocos medios económicos pero con toda la ilusión del mundo pese a las penalidades. Charlie será uno de los cinco niños, junto con otros cuatro pequeños más que peculiares, a los que Willy Wonka invitará a visitar su fábrica de chocolate y golosinas, un lugar misterioso al que nadie ha entrado en años, los mismos que Wonka lleva sin aparecer en público.

Además del diseño de los espectaculares decorados de la fábrica, sobresale con luz propia en esta película el trabajo musical de Danny Elfman (autor de la música de todas las películas de Burton salvo a Ed Wood), que ha respetado las letras que Roald Dahl creó hace décadas para las canciones de los Oompa Loompas, unos seres simpáticos y, de la mano del también dibujante y escritor Tim Burton, sorprendentes en cada una de sus escenas.

Burton, de clara inclinación por lo gótico, fantástico y romántico, no sólo se ha rodeado de sus habituales colaboradores detrás de la cámara para llevar la magia de Charlie y la fábrica de chocolate a la gran pantalla, sino también con actores con los que ya había trabajado. Así, Helena Bonham-Carter, actual pareja del director, interpreta a la madre de Charlie y Christopher Lee, después de haber participado en las sagas de El Señor de los Anillos y Star Wars, se reúne con Burton tras Sleepy Hollow en un pequeño papel, el del padre de Willy Wonka. Diversión asegurada para toda la familia.