El consumo de plásticos crece en un 7% en Chile, impulsado por la minería y la agricultura

En Chile se consumieron 1.238.000 toneladas de plásticos en 2024, lo que representó un aumento del 7% con respecto al año anterior. Los datos se desprenden de un estudio estadístico realizado por la Asociación Gremial de Industriales del Plástico (ASIPLA), el cual indica que el alza estuvo impulsada por las industrias de la minería y la agricultura.

Las mayores las importaciones de materia prima virgen respondieron a factores como la extensión de los tiempos de tránsito de la cadena logística, lo que ha generado la necesidad de disponer de mayores inventarios en el país, concluyó el reporte. Y también determinó que, en cuanto a materia prima plástica reciclada, la implementación de leyes que impactan a esta industria produjo un incremento del 64% en la importación de Tereftalato de Polietileno (PET) reciclado, que se debió, en parte, a un alza en la demanda por residuos de botellas plásticas en el país sudamericano, producto de la instalación de dos plantas de "bottle to bottle" -o reciclaje de botella a botella– en medio de la implementación de la Ley de plásticos de un solo uso en el país sudamericano, cuya primera etapa entró en vigencia en 2022.

En Chile se ha intensificado la presión para eliminar del mercado los plásticos de un solo uso, especialmente aquellos envases y utensilios desechables que tras un único uso son descartados.

Magdalena Balcells, gerente general de Asipla, explica que hoy la oferta de PET recuperado y reciclado en el país está siendo absorbida por la gran demanda de este material, que se genera una vez entrada en vigor la exigencia de incorporación de un 15% de ese material en botellas, desde el 1 de enero de este 2025. “A esto se suma el hecho de que el rPET es ampliamente utilizado en otras aplicaciones como los clamshell de fruta (un tipo de envase plástico y transparente), para consumo local y exportación, o zunchos plásticos para embalaje, lo que explica la necesidad de importar PET reciclado para las aplicaciones distintas a las botellas”, agregó.

Con todo, el estudio destaca las dificultades de esta industria que reúne a más de 460 empresas en el país, dado que la generación de empleos directos en el sector decreció el 12% entre 2022 y 2023. Lo que el análisis atribuye al cierre o traslado a otros países de empresas manufactureras del rubro.

El reporte indica que hubo una menor inversión en maquinaria y una disminución en la producción. Esto, en consecuencia, trajo una baja en la exportación de manufactura plástica. Según el documento, la situación obedeció al impacto que han tenido para esta industria elementos como el aumento del precio de la energía a nivel global y la “cantidad de exigencias regulatorias en el ámbito laboral, que han significado para las empresas un importante aumento de costos y consecuente pérdida de competitividad frente a la misma industria en países vecinos como Perú, Brasil y Argentina”.

Para Balcells en el contexto económico de Chile, de un crecimiento inferior al 3% anual, “no es posible concluir que el aumento del consumo aparente de plástico en 2024 vaya a ser una tendencia para los próximos años, más bien pareciera ser un elemento circunstancial”.