Ayuso, a las mujeres de izquierdas: “Se puede llegar lejos sin ser mujer de”

Tras tratar de presentar su viaje a Arabia Saudí como una victoria del feminismo, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha vuelto a presumir este miércoles de "otra cosa" que también ha "hecho por las mujeres": demostrar que puedes llegar lejos sin ser la mujer de. Esta crítica "a las [mujeres] de izquierda" es un retuit comentado a un mensaje de Rita Maestre, en el que la portavoz de Más Madrid dice; "Si Díaz Ayuso quería hacer algo por las mujeres en Arabia Saudí podría haber denunciado injusticias como que haya mujeres en la cárcel por defender sus derechos. Pretender convertirse en la adalid de las mujeres es patético".

"Desconozco de qué habla la señora Ayuso como desconoce ella las más elementales reglas de la educación", le ha replicado a preguntas de los periodistas Maestre durante la inauguración de un centro 24 horas de atención a víctimas de violencia sexual, informa Julia F. Cadenas.

"No hace más que repetir los clichés habituales de la extrema derecha en su crítica a las mujeres. Ha pasado muy rápido de ser un intento de adalid feminista la semana pasada a una vocera de los típicos insultos que la extrema derecha o el machismo le dedican a las mujeres que están en política. Le diría que vuelva a concentrarse en la defensa de los derechos de las mujeres que hizo la semana pasada, que es bastante más importante para la ciudad de Madrid", ha reclamado la portavoz de Más Madrid.

El intercambio de acusaciones tiene como origen la final de la competición que enfrentó el domingo pasado a Real Madrid y Atlético de Madrid en la ciudad saudí de Yeda, donde Ayuso entregó el trofeo y las medallas a los merengues sin velo, un acto aplaudido por sus compañeros del PP y sus socios de Ciudadanos y criticado entre otros por Más Madrid. 

Que mandatarias o personalidades extranjeras de todo el arco político visiten Arabia Saudí sin velo es bastante común y ya lo han hecho en el pasado Angela Merkel, Michelle Obama, la reina Sofía, Melania Trump, Ana Pastor cuando era ministra de Fomento o Trinidad Jiménez como ministra de Exteriores.

De hecho, nunca ha sido obligatorio que las mujeres occidentales se cubrieran con velo porque no se les dispensa el mismo trato discriminatorio que a las mujeres autóctonas, que no pueden salir a la calle sin abaya, una capa negra que cubre el cuerpo. No es una ley sino una costumbre mantenida gracias a la presión social de los más conservadores, con el islam como coartada.