La Guardia Civil abre en Madrid una unidad de análisis delictivo

Los integrantes de la UACD de Madrid son una psicóloga, una criminóloga y dos agentes que han trabajado en el Equipo Mujer y Menores (Emume). Cuentan con gran experiencia en tratar delitos delicados. Se trata del primer equipo descentralizado y de una experiencia piloto. En caso de funcionar se extendería a todas las comandancias de España.

La UACD central, dependiente de la Dirección General de la Guardia Civil, se creó en 1994. En su larga trayectoria han investigado homicidios, asesinatos, secuestros, lesiones, agresiones sexuales y grandes catástrofes, entre otras. “De todos estos trabajos, la Comandancia de la Guardia Civil ha supuesto casi el 30% del trabajo de estos años, con más de 250 casos. De ahí, que sea necesaria esta descentralización”, relató la capitán de la UACD central, María Luisa Calcerrada.

Este equipo central ha trabajado en temas tan diversos como el accidente del avión de Spanair ocurrido el 20 de agosto de 2008 en el aeropuerto de Madrid-Barajas, el secuestro e intento de asesinato de dos hermanos en Torrelaguna o un guardia civil pirómano detenido en Navas del Rey. El 91% de los casos que ha atendido hasta el momento la UACD han sido agresiones sexuales y 9% restantes homicidios.

Entre los primeros cometidos que está abordando la unidad de Madrid está el estudio de las agresiones sexuales cometidas en la región desde principio de año. Las guardias buscan realizar un perfil del violador medio a través de las más de 50 denuncias presentadas desde enero por este delito, según explicó la cabo primera responsable de Madrid, Eva Silva. Esta licenciada en Psicología ha trabajado siete años en Policía Judicial, con lo que ha tenido un conocimiento directo de los delitos de la región.

Otro cometido que están abordando estos profesionales es el estudio sociodemográfico de la prostitución a través de los clubes de alterne de la región: “Muchas veces se tienen muchos prejuicios de esta profesión porque se desconoce”. Entre los últimos casos tratados están el de un joven de 19 años que supuestamente había sido retenido por su padre durante dos años en Rivas-Vaciamadrid.