La policía investiga un fuego en los juzgados de Sevilla

La Policía Científica investiga las causas de un fuego originado este martes en los juzgados de Prado de San Sebastián de Sevilla. Las llamas se iniciaron pasadas las 14.00 en dos puntos distintos del inmueble: en la tercera planta y en el sótano. Precisamente, es la distancia entre las dos dependencias afectadas lo que indica que las llamas podrían haber sido provocadas, apuntan fuentes cercanas a la investigación. El fuego habría afectado a expedientes ya archivados de menor importancia, según explica el decano de los jueces de Sevilla, Francisco Guerrero.

Las llamas se iniciaron en dos archivos del edificio: el perteneciente al Juzgado de Instrucción 13 y el ubicado en el sótano. Tras detectarse el fuego, los agentes de la Guardia Civil, encargados de la custodia de estas dependencias, desalojaron el inmueble (en el que están los juzgados de instrucción y el decanato). Según dichas fuentes, debido a la fecha y a la hora en la que se produjo el incidente, en el edificio solo permanecían los funcionarios, varios magistrados y algunos ciudadanos. Entre los desalojados se encontraba la magistrada del caso de los ERE, Mercedes Alaya, quien se reincorporó el lunes al juzgado.

A los pocos minutos de producirse el desalojo, los bomberos llegaron al edificio y sofocaron las llamas con extintores de mano. Según fuentes municipales, los agentes habrían resuelto el siniestro “con rapidez y sin mayores complicaciones”.

Tras el incendio, el sindicato CC OO ha señalado la necesidad de reformar estas dependencias, una actuación que ha calificado como “reivindicación histórica”. “No nos sorprende que esto pueda ocurrir, ya que los juzgados están repletos de papel y esto, junto a la obsoleta instalación eléctrica, podría dar lugar a que saltara una chispa que incendiara el papel y, consecuentemente, el fuego se extendiera”, asegura Inmaculada Centeno, del sector de Servicios a la Ciudadanía del sindicato, informó Europa Press.

Hace poco más de un mes, los bomberos también tuvieron que actuar en el edificio tras producirse un fuego en una de las máquinas de aire acondicionado, instalada en la fachada. Las llamas se extendieron por los aparatos que estaban debajo.