Ucrania derrota a Rusia en el concurso Maria Canals

En la resolución de la 60ª edición del Concurso Internacional de Música Maria Canals hubo, claro, nervios y emoción. Pero este año también morbo añadido por la geopolítica europea: en el escenario del Palau de la Música llegaron a la final para el primer premio tres jóvenes, una pianista de Ucrania y dos procedentes de Rusia, acompañados por la Simfónica del Vallés y Rubén Gimeno. Aunque podían escoger entre ocho compositores, incluidos Beethoven, Mozart o Liszt, los tres apostaron por el virtuosismo fulgurante de los clásicos rusos. Ganó la ucrania Regina Chernychko, de 27 años, que escogió el Concierto núm. 2 de Rachmaninov e inclinó la balanza a su favor, obteniendo el primer premio, dotado con 15.000 euros y una serie de conciertos por España y el extranjero. Por su parte, los finalistas rusos —Sergey Belyavskiy, el más joven, de solo 20 años, y Tatiana Chernichka, de 29— tocaron la misma obra, el concierto de Chaikovski, logrando respectivamente el segundo (10.000 euros) y tercer (6.000 euros) premio.

 Noche de ilusión y aniversarios redondos, porque, además de alcanzar su 60ª edición, el 12 de marzo se cumplió el centenario del nacimiento de la pianista y pedagoga catalana Maria Canals, que fundó en 1954 el concurso, el más antiguo de España. Doble aniversario para una cita que este año ha contado con la presencia en Barcelona de 88 jóvenes pianistas de 26 países. Rompiendo la tónica de los últimos años, ninguno de los numerosos concursantes de Corea, Japón y China logró colarse en la prueba final.

El fallo del jurado decepcionó a buena parte del público que llenaba el Palau, y que, seducido por su juventud y encanto, otorgó el premio popular a Belyavskiy, finalista favorito que también se llevó el premio del jurado de estudiantes. Pero el Canals tiene sus reglas y el veredicto se obtiene con la nota media de todas las pruebas realizadas, en las que se valora ante todo dominio y destreza técnica.

Los tres finalistas mostraron un nivel técnico altísimo, pero también cometieron muchos fallos. La intérprete más delicada y musical fue Chernichka en una quizás demasiado lenta versión del concierto de Chaikovski, partitura en la que Belyavskiy lució un sonido más potente y madera de solista, aunque cometió demasiados fallos por los nervios. Tampoco resultó redonda la actuación final de la ganadora, Chernychko, que tuvo serios problemas para cuadrar el último movimiento del concierto de Rachmaninov.

Tras estudiar piano con su madre en la Escuela Especial de Charkiw, Chernychko completó su formación con profesores como Zaharova Svetlana, Olga Rissin-Morenova, Leonid Margarius y Ralf Gothóni. La joven pianista ha actuado con diversas orquestas de Ucrania, Italia y España.

Como en anteriores convocatorias, el Maria Canals ha acompañado las pruebas con más de 200 actividades. Frederic Amat, autor del cartel, ha añadido su nombre a una tradición iniciada en 1979 por Joan Miró y continuada por figuras como Antoni Clavé (1994) y Antoni Tàpies (2004).