El PP vasco tiende puentes con el PNV tras dejar claro su error al ir con Sortu

El portavoz parlamentario y presidente del PP de Gipuzkoa, Borja Sémper, ha asegurado que su partido intentará "restablecer y fortalecer" la "unidad política", al menos con el PNV y el PSE-EE, pese a que la formación jeltzale ha demostrado con "el error" del pasado sábado, al participar en la manifestación de Bilbao, que "se equivoca".

En un desayuno informativo con representantes de los medios de comunicación, el dirigente popular ha pedido "sensatez, altura de miras, tranquilidad y también liderazgo" al lehendakari, Iñigo Urkullu, "para encauzar algo que se ha torcido y no debería haberse torcido".

En este sentido, ha indicado que la presidente del PP vasco, Arantza Quiroga, ya le ha solicitado una reunión para intentar "volver a un escenario de tranquilidad" porque PP, PNV y PSE deben de "ir juntos en la reivindicación de cosas fundamentales" y no permitir que "el liderazgo político en Euskadi lo marque la reivindicación de la izquierda abertzale". También ha indicado que la dirigente del PP prepara un encuentro con el presidente del Gobierno central, Mariano Rajoy, con "carácter prioritario".

Sémper ha señalado que el fin de ETA "está trayendo una tensión política injustificada" que, a su juicio, responde a "una estrategia calculada" por la izquierda abertzale, que "está empeñada en pasar la página de la violencia y su responsabilidad política en esa etapa de violencia sin afrontar su pasado".

Además, ha reprochado que pretenda situar "el debate sobre los presos y todo lo que eso conlleva como prioritario en la agenda política vasca" con el fin de "enmascarar el rotundo fracaso" de su estrategia política de "justificar el terrorismo durante décadas".

En este contexto, se ha marcado como objetivo de su partido para este nuevo curso político "trazar una estrategia bien clara y compartida, al menos con el PSE y PNV frente a la arrogancia y la falta de sensibilidad que aún hoy día demuestra la izquierda abertzale", y que debe de pasar, en primer lugar, por "no entrar en el juego" de ésta y tener "bien claras las prioridades de esta tierra".

Tras destacar que el PP va a intentar ejercer un "liderazgo" para "restablecer y fortalecer la unidad política, al menos entre PNV, PSE y PP", con el objetivo de lograr "la necesaria y obligatoria disolución de ETA", ha insistido en la necesidad de alcanzar "pactos de estabilidad política" para Euskadi, algo para lo cual los populares están dispuestos a "dejar pelos en la gatera si otros lo hacen". Asimismo, ha indicado que el PP va ha hacer "pedagogía política en el resto de España para poner en valor lo vasco".

Sémper ha criticado que el PNV, "movido por la ansiedad impropia de quien gobierna", ha demostrado el pasado sábado, con la convocatoria y participación en la manifestación de Bilbao, que "se equivoca" y que tiene "sus ansiedades, miedos y vértigos".

A su juicio, supone "una torpeza" por parte de la formación jeltzale que diera "cobertura a una manifestación en la que no pintaba nada un partido democrático". Respecto al hecho de que se prohibiera la marcha convocada por Tantaz Tanta, ha indicado que su partido "respeta y acata cualquier decisión judicial, guste o no".

Además, ha asegurado que le llama la atención que el PNV esté "condicionado" por la estrategia de la izquierda abertzale y ha opinado que, ante el fin de ETA, se está generando "un nuevo escenario de competencia entre PNV y Bildu que hasta ahora no existía" que genera "cierta incomodidad" para los jeltzales a la hora de posicionarse políticamente. "Me gustaría que el PNV tuviera las cosas claras sobre por dónde hay que ir en este escenario post-ETA", ha señalado.

"Por muchos intereses que tenga la izquierda abertzale, por mucha premuras, por muchos problemas internos que el nuevo escenario les genere ni la política vasca, ni mucho menos la sociedad vasca le debe nada a la izquierda abertzale, ni por supuesto a ETA", ha defendido, para añadir que no son los vascos quienes tienen que "recular ni flexibilizar su compromiso democrático para incorporar a nadie a la democracia", sino que "son ellos quienes tienen que hacer un esfuerzo todavía, un recorrido para incorporarse a la democracia".

Por ello, Sémper ha abogado por "hacer mucha pedagogía haciendo apología de la democracia y de la convivencia en Euskadi" lo cual no se lleva a cabo "cediendo, flexibilizando las exigencias democráticas que la inmensa mayoría de los vascos tenemos asumidos desde hace décadas". "Son quienes dicen que han cambiado quienes tienen que hacer un recorrido a la democracia con total contundencia y claridad", ha añadido.

A su juicio, la IA tiene "un problema interno de primer nivel", en primer lugar para "desmontar" una cultura política "de violencia propagada durante décadas", y por otro, "con el colectivo de presos" que está utilizando para que "parezca que si hay una solución que pueda sonar a amnistía se consolida un escenario en el que ETA ya no va a asesinar nunca más", algo que "vuelve a sonar perverso".

Sémper se ha mostrado molesto ante el hecho de que se intente transmitir "el mensaje de que el PP no quiere la paz", ya que "nadie más que el PP quiere que ETA desaparezca y deje de matar", y ha asegurado que la responsabilidad de que la política de dispersión siga "vigente" es "única y exclusivamente de ETA", que está "muerta, acabada pero no quiere reconocer esa derrota", porque el Gobierno central "ya ha marcado cuándo se acaba" y los reclusos de la banda terrorista "tienen que cumplir la Ley como la cumple todo hijo de vecino".