Pastor para la iglesia

En una iniciativa artística plena de felices coincidencias homónimas, el artista Perico Pastor presentó ayer los dos murales que ha pintado para la decoración de la basílica de los Sants Just i Pastor en Barcelona. Las pinturas representan sendas escenas bíblicas que ofrecen un simbolismo eucarístico: la lluvia del alimenticio maná durante la travesía del desierto del pueblo de Israel y el milagro evangélico de la multiplicación de los panes y los peces. Las obras, mostradas ayer en el Espai Volart (Àusias Marc, 22) bajo el título de proyecto Dos Pastor per a Sant Just,serán emplazadas próximamente en la iglesia, una de las más antiguas de la ciudad.

Perico Pastor apuntó que aporta su visión “atea” de dos de los relatos bíblicos más populares. Las dos pinturas se exhiben junto a los dibujos y tintas preparatorios durante solo tres días en la galería de la Fundación Vila Casas, que ha actuado de mecenas en la operación. El artista explicó que las pinturas tienen su origen en un encargo del párroco de la iglesia, Armand Puig, traductor de la Biblia interconfesional que publicó Enciclopedia Catalana con ilustraciones del propio Pastor. De aquel proyecto, añadió Pastor, surgió “una amistad y complicidad”.

Las dos pinturas, de 2,5 por 2,6 metros, se instalarán antes de final de año en la capilla de la Eucaristía de la basílica barcelonesa.