Calzada niega haberse enriquecido con Caixa Girona

El expresidente de Caixa Girona, Arcadi Calzada, negó ayer en la comisión de investigación sobre las cajas de ahorros que se celebra en el Parlament que utilizara en ningún momento la entidad financiera para enriquecerse o para favorecer económicamente a su familia, y se mostró indignado cuando algún diputado le comparó o vinculó con Fèlix Millet. “No me compare ni de lejos con el señor Millet. Un poco de respeto”, se quejó

Calzada, que fue presidente entre 1996 y 2009, admitió que esta entidad compró obras de arte a una galería que era de su propiedad y que se convertían luego en regalos de Navidad, pero restó trascendencia a este hecho recordando de manera insistente que la justicia archivó en 2006 el proceso abierto a raíz de una denuncia. “Históricamente la institución confiaba en mi galería para hacer regalos de Navidad”, aseguró para justificar que se mantuviera esta práctica incluso cuando él accedió a la presidencia de Caixa Girona.

Calzada también consideró “irrelevante” que la obra social contratara por 500.000 euros los servicios externos de una empresa de la que su hija es copropietaria, al tiempo que ha relativizado las dudas sobre créditos concedidos o facturas de la fundación que aparecieron en un informe de la Generalitat elaborado durante el último Gobierno tripartito.

Sin repercusiones

Su sucesor en la presidencia de Caixa Girona, Manel Serra, aseguró que optó por no llevar a la fiscalía las irregularidades detectadas en la gestión del anterior presidente, Arcadi Calzada, porque prefirió hacer “borrón y cuenta nueva”, por “el bien de la entidad”. Al ser preguntado por las razones que le llevaron a no poner estas irregularidades en conocimiento de la fiscalía, Serra ha asegurado que se lo planteó, pero que los servicios jurídicos le recomendaron no hacerlo porque “no me tocaba a mí”.