Cañamero se instala en el SAT y no comparece por cuarta vez en el TSJA

El portavoz nacional del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), Diego Cañamero, ha decidido  este lunes instalarse en la sede que tiene el sindicato en su localidad de residencia, El Coronil (Sevilla), tras ordenar el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) su detención por no comparecer hasta en tres ocasiones —con la de este lunes cuatro— para declarar como imputado por la ocupación de la finca de Las Turquillas el verano pasado.

El viernes el alto tribunal andaluz dictó una orden de detención después de que el sindicalista no se presentara a declarar ni justificara en modo alguno la incomparecencia al tribunal, si bien ha dicho públicamente que se declara “insumiso judicial” en protesta por la “represión contra el SAT y la persecución de la Policía contra el movimiento”.

El resto de imputados en esta causa, que supera el medio centenar y entre los que se encuentra el parlamentario andaluz y alcalde de Marinaleda (Sevilla), Juan Manuel Sánchez Gordillo, sí que han acudido meses atrás aunque se han acogido a su derecho a no declarar. Cañamero, que en otras ocasiones ha acompañado a la Real Chancillería de Granada, sede del TSJA, a Sánchez Gordillo, no tiene previsto asistir pese a la advertencia judicial.

La nueva incomparecencia, que se produce incluso pese a la orden de detención, motivó ayer que el instructor del caso, el magistrado Jerónimo Garvín, dictara un nuevo auto en el que aplaza la declaración del portavoz del SAT, que no había sido detenido hasta el momento en el que estaba prevista su declaración, que era este lunes a las 12.00 horas en el Salón de Plenos del TSJA.

Los alrededores de la sede judicial estaban tranquilos, aunque como es habitual estuvo presente un pequeño grupo de militantes del sindicato dispuesto a protestar por lo que entienden es una “persecución” contra el SAT. Ante la sede del alto tribunal se exhibía pancartas con el lema “Andaluces levantaos contra el paro y la precariedad”.

Desde el pasado junio, tras la primera incomparecencia de Cañamero en el TSJA —la segunda por este caso ya que fue citado primero en un juzgado de Osuna—, el juez ya había advertido de que el “efecto inmediato” de la citación consiste en “originar la obligación por parte del citado de comparecer en el lugar, día y hora que se le señale para ser oído en la presencia judicial”. El juez insistía, de hecho, en que la orden de comparecencia se podía convertir en una de detención si no iba y no lo justificaba con causa legítima.

La instrucción de este caso se concluyó en mayo, aunque el auto de procedimiento abreviado quedó en suspenso tras comprobar que faltaban diez personas por declarar. Salvo Cañamero, ya han comparecido todas, aunque no han dado su versión. En ese documento el juez consideró que hay indicios de posibles delitos de usurpación, daños y desobediencia, además de falta de hurto, que habrían ocurrido en la ocupación que entre el 24 de julio y el 9 de agosto de 2012 hicieron los sindicalistas en la finca de Las Turquillas, donde se ubica la Yeguada Militar del Ejército.

Los imputados sostienen que la ocupación se hizo como protesta para denunciar el impacto de la crisis sobre el campo andaluz. Y aunque tras las diligencias practicadas se detallaron una serie de daños, los sindicalistas consideran que su actuación fue “pacífica, simbólica y tranquila”.

El portavoz del SAT ha continuado con sus actos y este lunes ha dado rueda de prensa en su pueblo. La Guardia Civil tendrá que detener al sindicalista tras la orden dada por segunda vez por el instructor del caso que ha aplazado sin fecha concreta esa declaración. “Diego está muy animado, convencido de seguir adelante y no acatar las órdenes del tribunal”, manifestó a Efe su letrado, Antonio Folgoso.