Àlvar Caixal gana el Sant Joan con su primera novela

Rompiendo con una tradición no escrita de los últimos años en que el galardón recaía en autores con una obra ya consolidada, como Ada Castells (2011) o Andreu Martín (2011), el arqueólogo Álvar Caixal fue ayer el ganador de la 33ª edición del Premi Sant Joan Unnim de lengua catalana con su primera novela, Les llavors del silenci, obra de corte histórico que centra la historia en las Brigadas Internacionales inglesas. El premio es uno de los cinco mejor dotados de Cataluña, con 35.000 euros libres de impuestos, y conlleva la publicación de la obra por Ediciones 62 en otoño.

Si bien Caixal debuta en la novela, había participado en relatos y poemas en obras colectivas como L’arbreda ebrenca (2010) o El tren de la Vall de Zafán (2011). “No recuerdo ningún momento de mi vida en la que no haya estado escribiendo”, explica el ganador, “después de los relatos, saqué del cajón esta novela que había ido hilando hacía tiempo y la fui puliendo”.

“No recuerdo ningún momento de mi vida en la que no haya estado escribiendo”, explica el ganador

Les llavors del silenci, que se mueve entre los años previos a la Guerra Civil y el invierno de 2002, se centra en las Brigadas Internacionales en Cataluña: “Es una época que me interesa, en especial tras leer una historia real de 1938, cuando unos brigadistas británicos fueron capturados por los franquistas”.

La novela entreteje dos historias paralelas, situadas en países distintos. Por una parte, la frágil Emma, quien, en la penumbra de su hogar en un pequeño pueblo de Inglaterra, evoca el trágico recuerdo del prometido de su tía, brigadista desaparecido en Aragón. Por otro lado, Alfred vive con tranquilidad en Barcelona, sin grandes preocupaciones, hasta que asoma el suicidio de su padre, “franquista de segunda fila y demócrata por conveniencia”. Calaix cree que su novela aborda, en el fondo, “los límites de la identidad, sobre quienes somos o quienes creemos que somos”.