El aeródromo de Reus se queda sin mercancías

El aeropuerto de Reus puede ser el ejemplo de los efectos del crecimiento del de Zaragoza o de las consecuencias del recorte de plantilla y horarios que ha llevado a cabo Aena, el gestor aeroportuario, en su plan de racionalización. En los primeros cuatro meses de año, por sus pistas no ha pasado ni un solo kilo de mercancías.

Su escaso protagonismo en el negocio se había agudizado en los últimos años, en los que su movimiento de mercancías había caído en picado, pero ahora las estadísticas muestran un claro cero del que Aena no da explicaciones. Pasqual Toral, presidente del comité de empresa de Aena en el aeropuerto de Reus, asegura que la reducción a cero se ha producido como consecuencia de que el horario para que aterricen aviones ha pasado desde la medianoche, hora a la que se cerraba antes del pasado mes de noviembre a clausurar las instalaciones a las 10 de la noche. Ese recorte de horas dos horas ha diezmado a un sector que en Reus operaba básicamente de noche.