
Más, o menos política
La pandemia dejará grabado a fuego en nuestras sociedades la necesidad de una sanidad universal y suficientemente dotada de recursos. Si no por justicia social, por egoísmo

Periodista y directora de EL PAÍS entre julio de 2021 y junio de 2025

La pandemia dejará grabado a fuego en nuestras sociedades la necesidad de una sanidad universal y suficientemente dotada de recursos. Si no por justicia social, por egoísmo

Toca a los Gobiernos evitar que las consecuencias económicas de la pandemia profundicen en una desigualdad que ya era un riesgo para la democracia antes de esta crisis

Los Gobiernos están desbordados y diezmados ellos mismos por el virus. El español también. Tensando los límites de la democracia. Con aciertos y errores evidentes

Estamos como siempre, y como nunca, en manos de los profesionales de la salud. No quiero que se me olvide cuando todo esto pase

Todo lo que creíamos sólido se ha esfumado y estamos recluidos sin saber muy bien qué hacer con el sueño cumplido de poder estar en casa

Reclamamos, airados, medidas contra el peligro objetivo del coronavirus y contra nuestro propio miedo, pero que no nos cambien la vida

El movimiento feminista ha conseguido que se resquebraje el imperio de los “usos sociales” que llamaban galantería al acoso y al abuso de poder

Gestionar el miedo forma parte de cualquier ecuación contemporánea para afrontar una crisis

El pensamiento hegemónico que recorre el planeta rico se traduce en los mismos eslóganes con matices locales: 'America first', 'los catalanes mejor solos', y 'España para los españoles'

Algunos miedos se han materializado sin que llegara el fin del mundo y otros han resultado tan ridículos como lo fueron al principio

Este país necesita acción gubernamental. Ya criticaremos al Ejecutivo cuando se equivoque. Siempre es deseable el consenso, pero es peor la parálisis

Ni Esquerra va a abandonar la retórica independentista, ni Torra va a devenir un líder responsable

En el Gobierno están mujeres con largas o cortas, pero intensas trayectorias. Pero apenas nada de eso está en la conversación pública

El Gobierno debuta con dos medidas que anticipan una legislatura sin miedo al cuerpo a cuerpo

Ya tenemos Gobierno. De coalición de izquierdas, inédito, con apoyos complejos. Y la derecha tira del manual de la crispación como si 2020 fuera 2004

Hay una guerra declarada contra el periodismo que mata allí donde puede matar, que silencia allí donde puede silenciar y que busca convertir el trabajo de los periodistas en irrelevante

La memoria no puede ser una ratonera que nos atrape sin salida

O se abstiene ERC, o el PP, o Cs vota afirmativamente la investidura. O les damos a los negacionistas la ocasión de aspirar a todo

El silencio, la falta de explicaciones políticas de Pedro Sánchez alimenta a los apocalípticos y deja sin argumentos a los escépticos, optimistas o pesimistas

A la mayoría de los españoles les siguen preocupando en primer lugar el paro, la economía y los políticos, y abajo, mucho más abajo, la inmigración y el independentismo catalán

Ha habido que ver a Vox a los pies de la base social de los progresistas para que el pragmatismo se imponga

Resulta asombroso que, por un puñado de votos, no hubiera un coro de cuatro voces que impugnara la cantidad de simplezas antidemocráticas que soltó Abascal

Cataluña recuperó las libertades y el autogobierno al mismo ritmo que el resto de España y con la fuerza compartida

Las dos principales novedades desde 2017 son la desaparición de la presidencia de la Generalitat como referente institucional y la desaparición del tabú de la violencia

No hubo república en Cataluña, ni como objetivo ni como realidad; fue un trampantojo al que los dirigentes prendieron fuego creyendo que las llamas no iban a alcanzarles

Nada parece más importante ahora que elegir a quienes deben intentar elaborar las nuevas reglas del mundo nuevo

La violencia no es la vía para conseguir objetivos políticos en las democracias y solo cabe el rechazo

El tiempo en debates estériles y torpedeo jurídico, lo estamos perdiendo por quienes se oponen o arrastran los pies en un asunto que la mayoría de las democracias ha resuelto hace mucho tiempo

Se resuelva como se resuelva el vacío de Gobierno de España, el precio que van a pagar es la desconfianza que inspiran más allá de sus círculos de cortesanos

Del PSOE era esperable que tomara inmediatamente la iniciativa de una negociación sobre los objetivos de la legislatura

Debe ser aquella confianza un poco naif, producto de vivir en una España en la que todo parecía posible, la que me impida tener una visión apocalíptica del presente y el futuro

Los mismos que mimaron o ayudaron sinceramente al líder de Cs le exigen cuentas del papel de bisagra en el que creyeron o invirtieron, según el caso

Nada puede hacernos más daño como país que asumir que los cambios tras unas elecciones se llevan por delante los consensos sobre derechos civiles, salud pública o seguridad

Si no tuviéramos pendiente un asunto tan grave y tan difícil como la crisis catalana, podríamos hablar, sin más, de la reedición de un bipartidismo multipartido

Se desconoce todavía si el líder del PSOE puede hacer propuestas políticas muy innovadoras o si tendrá mucha capacidad negociadora en un clima tan polarizado

La ventaja de la democracia es que la autocrítica te la hace la gente en las urnas

El Congreso de los Diputados que ayer inauguraba legislatura recogía los restos de todos los naufragios y algunas paradojas

No hay política de natalidad que pueda con los precios del alquiler o la compra en Madrid y Barcelona

En todos los ámbitos y territorios, las fuerzas más votadas son las que apuestan, de una manera u otra, por la moderación. Incluso, parece, en el independentismo catalán

El verdadero riesgo para la gobernabilidad de España es que esta batalla en las derechas se prolongue mucho tiempo