Las aportaciones de ciudadanos y asociaciones permiten repatriar el cuerpo de Keita

Apenas cinco días después de que se hiciera pública la aciaga historia de Mamadou Yacouba Keita, un inmigrante de Malí de 26 años que falleció ahogado en la presa de Manises (Valencia) cuando intentaba salvar a un niño, los ciudadanos han mostrado su solidaridad con la familia y han reunido a través de donaciones los cerca de 4.000 euros necesarios para repatriar el cadáver. Una cantidad que la familia no podía reunir y que la Consejería de Solidaridad y Ciudadanía había negado por carecer de presupuesto para estos casos.

La red Sahel para la inmigración, una modesta asociación no gubernamental valenciana, abrió una cuenta para recaudar fondos y aportó los primeros 1.000 euros. Pronto las ayudas empezaron a llegar. De Cáritas, de CC OO, de la asociación Rumiñahui, de la Comunidad Islámica de Valencia y de infinidad de particulares.

"Queremos agradecer la ayuda de la sociedad valenciana y también de todas las personas que han colaborado con esta campaña desde todos los puntos de España", señala Luis Poveda, portavoz de Sahel, que ya había coordinado desde Valencia una campaña similar para contribuir a repatriar el cuerpo de un joven -también maliense- que murió apuñalado en un atraco en diciembre de 2008 en La Mojonera (Almería).

El dinero sobrante de esta campaña se entregará al hermano del fallecido, Djime Keita, para que regrese a su país, ya que para desplazarse a Valencia e intentar repatriar el cuerpo de Keita se gastó 500 euros, el sueldo de un año en su país, que ahora debe. Djime da las gracias a toda la sociedad española por prestar la ayuda necesaria para materializar el deseo familiar: que el cuerpo de su hermano descanse en África.

Ni los pocos familiares que Keita tenía en España, ni los amigos -todos en situación marginal, como también los padres del niño salvado- podían aportar dinero porque están en paro.

Está previsto que Keita culmine el último de sus viajes, a su Malí natal, a finales de esta semana. La propia funeraria encargada de la repatriación también se ha sumado a esta causa colaborando en la campaña.