Asciende a 32 los afectados por legionela en la localidad barcelonesa de Mataró
Tres de las cuatro torres de refrigeración donde se sospecha que se originó el brote ya han sido desinfectadas
Los afectados por el brote de legionela de la localidad de Mataró (Barcelona) ascienden ya a 32, al aparecer hoy 13 nuevos casos que se suman a los 19 que se habían contabilizado hasta ayer sábado. De todos los pacientes atendidos desde el pasado 23 de julio, tres personas han sido dadas de alta, mientras que los otros 29 continúan ingresados, y de ellos dos presentan pronóstico reservado, según han informado fuentes del hospital de Mataró.
Las mismas fuentes han explicado que la mayoría de los afectados evolucionan favorablemente y se encuentran fuera de peligro, y que solo hay dos personas sobre las que el equipo médico del hospital tiene un pronóstico reservado, dos mujeres de 82 y 83 años respectivamente que están ingresadas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). La primera de ellas ingresó en el hospital ayer sábado y se espera que pueda salir de la UCI en las próximas horas, y la otra ha sido hospitalizada esta mañana.
Por otra parte, de las cuatro torres de refrigeración que se han investigado como posibles causantes de este brote, tres han sido ya desinfectadas mientras que la cuarta se encuentra todavía en proceso de análisis. De estas cuatro torres se sabe que dos de ellas pertenecen a equipamientos públicos (aunque los servicios médicos no han querido especificar a qué organismo) y las otras dos a pequeñas industrias. Todas ellas se encuentran en la zona industrial del Pla d'en Boet, en el barrio de Cerdanyola.
Ningún riesgo en el agua
El departamento de Sanidad ha comunicado hoy que se puede continuar bebiendo agua municipal porque no existe ningún riesgo y que las fuentes ornamentales de Cerdanyola (de las cuáles el Ayuntamiento cortó el suministro de agua) volverán a funcionar con normalidad la próxima semana.
Los servicios sanitarios han anunciado además que mañana se instalará en el Centro de Atención Primaria del barrio de Cerdanyola (en el que habitan todos los afectados por el brote hasta el momento) un dispositivo informativo para responder a cualquier demanda de los vecinos del barrio e informar sobre los síntomas de la enfermedad.
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