La clínica estética donde murió una paciente en Madrid no tenía quirófano

Ayer se supo que la clínica estética donde murió una mujer el viernes tras una operación estética era clandestina. Hoy, según ha revelado el abogado de la víctima, se ha sabido que ni siquiera contaba con quirófano o sala de reanimación. La clínica Icema, situada en el madrileño barrio de Salamanca está cada vez más bajo sospecha, aunque sus responsables mantienen que sus actividades son totalmente legales.

Ignacio Vázquez, letrado de la mujer fallecida, Débora Catalán Gutiérrez, de 36 años, ha hecho estas acusaciones ante los micrófonos del programa Hoy por Hoy, en la cadena SER. Vázquez ha precisado además que Débora había acudido al centro para someterse a una liposucción, y no a una mesoterapia (tratamiento de la celulitis mediante inyecciones), tal y como se había informado.

Actividad quirúrgica

Este dato, que Vázquez apoya tanto en el testimonio de varias amigas de la fallecida como en el presupuesto de la intervención, es importante, por cuanto el centro ha declarado ser de mesoterapia y no de cirugía, actividad que requeriría un más complejo aparato médico.

Según este testimonio, cuando el estado de la fallecida fue crítico, los responsables de la operación estuvieron intentando reanimarla durante dos horas antes de llamar a una ambulancia. Vázquez cree que no es lógico que en una clínica que carece de sala de reanimación y de quirófano se demorase la llamada a los servicios de emergencia durante dos horas, pese a que la situación de su cliente era extremadamente grave.

Además de falta de autorización para ejercer estas actividades, el centro carecía de licencia del Ayuntamiento, lo que le convierte además de ilegal en clandestino. Se calcula que 6.000 médicos ejercen de estéticos en España sin la menor titulación.

"Negligencia" de Sanidad

La presidenta de la Asociación del Defensor del Paciente, Carmen Flores, ha denunciado que la Administración "está actuando con negligencia" ante el problema de las clínicas de cirugía estética. En este sentido, ha criticado a la ministra de Sanidad, Celia Villalobos, quien ayer anunció una nueva normativa para regular este tipo de centros. "La ministra dice que va a hacer una normativa, ¿por qué no lo ha hecho antes?".

Según Flores, la Asociación del Defensor del Paciente lleva denunciando, desde el año 1997, que "se hacen clínicas como churros, no se regula esta especialidad médica, el personal sanitario de más de un 60% de las clínicas privadas no reúnen las condiciones que tiene que reunir un profesional, no son clínicas homologadas, ni tienen servicio de reanimación o UVI". A este respecto, ha señalado que, "tal y como están las cosas", no entiende "cómo no hay muchísima más gente afectada".

Asimismo, Flores ha indicado que las clínicas deben disponer de UVI, habitaciones, quirófanos y equipo de reanimación, asi como que el cirujano realice un pre-operatorio completo, ya que aunque se presupone que el paciente está sano, puede tener algún problema de salud que sólo se detecta con una serie de análisis completos.

Flores ha reiterado que se deben realizar inspecciones periódicas a las clínicas y una normativa específica y prohibir la cirugía a menores.