Así es Lutz Huelle, el discreto nuevo director creativo de Delpozo

“No va tanto sobre un tipo de cuerpo o de edad, sino sobre la manera de vestir, de enfrentarse a la ropa, de observar cómo la usamos”, explicaba hace unos meses Lutz Huelle a S Moda, definiendo la firma que lleva su nombre. El diseñador alemán, recién confirmado sucesor de Josep Font en Delpozo, forma parte de un reducido grupo de creadores que se mantiene ajeno al gran público. Aclamado por la crítica y por un pequeño pero sólido ejército de leales seguidores, crea moda de concepto para el día a día de una clienta con un gusto muy definido. Son piezas que “están ancladas en la realidad y no tanto en la idea de vestirse para una alfombra roja”, expone. “Lo que realmente me gusta es conseguir prendas que parecen familiares y fáciles a primera vista, pero que, cuanto más las miras, más evolucionan en algo mucho más especial. Supongo que en el fondo esto trata de encontrar belleza y diferenciación en lo banal, en la vida diaria”. Una obsesión por estar presente en la cotidianeidad de las mujeres que sin duda abrirá nuevos horizontes a la española Delpozo.

Tras estudiar diseño en Central Saint Martins, el alemán trabajó tres años junto a Martin Margiela, especializándose en punto. Poco después, en el 2001, lanzaba su firma homónima junto a David Ballu en la que rendía pleitesía a materiales corrientes como el denim: “Por su universalidad y su atemporalidad y por su capacidad de hacer que cualquier cosa parezca fácil. A todo el mundo le gusta, independientemente de su género o su estilo. Es un tejido que funciona siempre”. Especialmente en los híbridos tan presentes en las colecciones de Huelle, esas que deconstruyen hasta la saciedad y se saltan cualquier barrera. “La mayoría de las veces me pregunto a mí mismo que quedaría bien en vaquero o qué no he visto aún. Me gustan las prendas y los materiales inesperados: mezclar jean con jacquard de oro o encaje por ejemplo; o simplemente cortar patrones que siento que no se han hecho antes”. El resultado funciona: “No sería exagerado decir que está haciendo algunas de las chaquetas y abrigos más cool en moda ahora mismo”, escribía la cronista de Vogue USA Nicole Phelps tras su último desfile en París en septiembre.

Lutz Huelle aspira a estar presente en el armario diario y, en un camino de doble sentido, también bebe inspiración compulsiva de las calles: “Simplemente me fijo en cómo viste la gente en realidad. En cómo queda un abrigo cuando alguien corre calle abajo, cómo una falda se ve desde cierta posición, cómo alguien se sube la chaqueta porque empieza a llover…”, afirma. ¿Su proceso creativo? Parte siempre de su preciado cuaderno negro: “Generalmente no puedo decir qué me inspira hasta después, normalmente son cosas que se me quedan en la cabeza y que luego afloran cuando estoy preparando una colección. Suelo llevar un pequeño cuaderno en el que apunto cosas que me vienen a la mente cuando viajo o cuando estoy sentado en un café. Y lo primero que hago cuando voy a empezar a diseñar es mirar mi libro negro”. Un enfoque sobre la creatividad que hoy está muy presente en el panorama general de la industria. Las mezclas de piezas, géneros o estilos que tan cómodamente se ha instalado en las pasarelas en los últimos años es algo que el nuevo creativo de Delpozo lleva practicando desde hace tiempo.