El “ni sí, ni no” de Cañete y la energía

"Ni me descarto, ni no me descarto", ha afirmado este lunes Miguel Arias Cañete en Bruselas, a donde ha acudido en calidad de ministro de España. En la capital belga, el titular de Agricultura, con uno de los nombres más barajados para encabezar la lista del PP a los comicios europeos, ha dejado claro lo que ya se sabía. Que él, en esta carrera hacia el 25 de mayo, por ahora, está y no está. Como la cuestión energética, que previsiblemente centrará una parte del debate electoral. Porque, tras la crisis de Crimea, el propio Parlamento comunitario ha querido destacar en su web un cambio de rumbo en esta materia: "Los hogares europeos ya no correrán el peligro de quedarse sin suministro de gas en futuras crisis energéticas, gracias a la aprobación de un nuevo sistema de coordinación e interconexión a escala europea".

Para echar un pulso a Rusia con Ucrania de por medio, la UE quiere reducir su dependencia energética del país gobernado por Vladimir Putin. Según los datos de la Comisión Europea, el 30% del gas natural importado por los Veintiocho en 2013 provino de Rusia. Y, además, en base a los datos de Eurostat, la nación euroasiática fue en 2010 el país que más gas, más petróleo y más hulla vendió a los entonces Veintisiete: 31,8; 34,5; y 22,1 millones de toneladas respectivamente.

Pero, todavía, a falta de saber si cuaja en la pelea electoral el modo de abordar esa estrategia de Bruselas; hay que recurrir a los documentos con los que el PSOE y el PP concurrieron a los comicios generales de 2011 para conocer mínimamente qué dirección marcan ambos partidos en materia energética. "Una economía competitiva requiere de fuentes de energías baratas, seguras y limpias", aseguraron los populares ese año, capitaneados por el candidato Mariano Rajoy. Este, defensor de la energía nuclear, defendía que "promoverían un sector de la energía que se erigiera como el factor de competitividad y desarrollo económico para España".

Los socialistas, por su parte, se decantaron por las renovables: "Ante un escenario previsible de aumento de la demanda energética mundial, que va a generar tensiones en los mercados de combustibles fósiles, hacemos una apuesta firme por las renovables como garantía de suministro eléctrico". Una tendencia en la que ahonda Izquierda Unida en el borrador de su programa para las europeas de 2014. La coalición plantea aumentar el uso de estas energías un 25% para 2020; así como la intervención pública en este sector estratégico y la descentralización del suministro para lograr la autosuficiencia de cada país.

Este lunes, los comicios han estado y no han estado en la agenda política de cara a las europeas  —como Arias Cañete y la cuestión energética—. La muerte del expresidente Adolfo Suárez ha provocado que la mayoría de partidos releguen a un segundo plano el enfrentamiento electoral. Eso sí, ERC ha aprobado este lunes su lista: con el filósofo Josep Maria Terricabras como número uno; y con Ernest Maragall, exconseller del PSC, como dos. Y la candidata de otro partido nacionalista, Izaskun Bilbao (PNV), ha pedido en una conferencia el arbitraje europeo para los "problemas territoriales que hoy carecen de solución a nivel de los estados miembros, como Escocia, Cataluña, Flandes o Euskadi".