Una empresa de Canadá compra las estatuillas de los Oscar

Cuando el próximo 24 de febrero de 2013 los ganadores de los Oscar agradezcan el premio, por primera vez en la historia estarán levantando una estatuilla que no habrá sido fabricada por una empresa estadounidense. La compañía canadiense St. Regys Crystal of Canada adquirirá el próximo 17 de diciembre R.S. Owens & Company, la empresa afincada en Chicago encargada de elaborar el galardón del cine de EE UU por excelencia desde hace más de 30 años.

No obstante, la aleación de metal formada por cobre, estaño y regulo de antominio, bañada con oro de 24 kilates de la que está compuesta el Oscar, seguirá realizándose en las fábricas de la misma empresa de Chicago, según aseguró el viernes pasado el presidente de R.S. Owens, Scott Siegel. La compañía, fundada en 1938 por Owen Siegel, el abuelo de su actual responsable, lleva varios años lidiando con los problemas derivados de la recesión. “La crisis economía y la competencia con China nos han obligado a buscar nuevos socios”, explicó Siegel. De momento, por tanto, debajo de la estatuilla dorada nadie leerá todavía: made in Canadá.

R.S. Owens es también la responsable de elaborar los premios Emmy y los de otorga la cadena de televisión MTV. De momento, la empresa de Chicago también seguirá fabricando esos galardones. Eso sí, lo hará con el 38% menos de su plantilla. Los propietarios han anunciado que, coincidiendo con el cambio de titularidad, la empresa despedirá antes de Navidad a 95 de sus 250 empleados. No obstante, Siegel señaló que cabía la posibilidad de que varios fueran contratados de nuevo por la filial estadounidense de St. Regys Crystal of Canada, que es la que se encargará de asumir la dirección de R. S. Owens.

No es el primer problema laboral que afronta la compañía fabricante de los Oscar. El año pasado, los trabajadores impidieron salir de la sede de la empresa a 50 camiones durante una protesta por la congelación salarial.