La Chureca da un paso adelante

"Nadie puede conocer una cosa así y no hacer nada". La vicepresidenta del Gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega, se quedó impresionada cuando visitó La Chureca, el mayor vertedero de Managua, la capital de, el verano de 2007. Le costaba concebir que hubiese gente viviendo allí. No una ni dos personas. Miles de familias sobreviven hacinadas en el basurero. De la Vega lo tuvo claro: había que terminar con esa situación. Así que, a través de la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (AECID), el Gobierno de España se comprometió a destinar 30 millones para un proyecto de cinco años, con posibilidad de ser prolongado, con el que se rehabilitará el vertedero y se construirán viviendas dignas para los actuales habitantes.

De momento ya se han invertido siete millones del total del presupuesto, según han confirmado fuentes de la AECID. Además, ONU-Habitat, la Oficina Regional para América Latina y el Caribe de Naciones Unidas, se ha comprometido a colaborar en un proyecto que ha estado bloqueado hasta hace muy poco tiempo un conflicto en la propiedad de las tierras. Un problema que, aparentemente, ha quedado resuelto. Uno de los dueños de las tierras, Carlos Martínez, participó junto a la alcaldesa de Managua, Daysi Torres, en una entrega de llaves simbólica. A pesar de ello, otro de los miembros de la familia Martínez asegura, según han publicado varios medios locales, que las tierras de su familiar sólo corresponden a una veintena de manzanas de las más de cien que componen La Chureca. La alcaldesa, que ha visitado esta semana Madrid, ha restado importancia a este hecho, y asegura que el proyecto saldrá adelante sí o sí.