Al menos once pasajeros de un autobús mueren ametrallados en el sur de Argelia

Un comando armado acribilló ayer con ametralladoras a los pasajeros de un autobús en una aldea de Argelia, causando la muerte a al menos once personas e hiriendo a otras diez, según han informado vecinos de la localidad de Medea, situada 80 kilómetros al sur de Argel. En los últimos diez años, entre 100.000 y 150.000 personas han muerto en el conflicto que azota el país desde 1992.

El ataque se ha producido en el barrio de Takbu, en las afueras de Medea. En la región operan comandos del Grupo Islámico Armado (GIA), una de las organizaciones terroristas que mantienen el país en guerra desde hace diez años.

Su líder, Rachid Abu Turab, sucedió hace unos meses a Antar Zuabri, asesinado el pasado 8 de febrero por las fuerzas de seguridad argelinas. El nuevo dirigente del GIA ha manifestado en varias ocasiones que continuará la línea radical y violenta de su predecesor hasta que se instauré un Estado islámico en Argelia, y ha rechazado la política de reconciliación nacional del presidente, Abdelaziz Buteflika.

"Sangre, violar, degollar"

"Ni tregua, ni diálogo, ni reconciliación, ni seguridad: sangre, sangre, destrucción, destrucción. Seguiremos destruyendo sus cosechas, tomando sus bienes, violando a sus mujeres, decapitando en las ciudades, pueblos y desiertos", ha indicado Rachid Abu Turab en un comunicado, tras afirmar que seguirán "matando y degollando sin respiro".

Más de 30 personas han perdido la vida de forma violenta en Argelia en lo que va de mes, y más de 640 desde el principio del año, según fuentes oficiales. El pasado domingo, otros dos viajeros murieron ametrallados después de que un grupo armado detuviese un autobús en un falso control de carretera cerca de Larbaa, zona dominada por el GIA y situada a 20 kilómetros al sur de Argel.