¿Qué está pasando en la familia Beckham? Las teorías del distanciamiento de Brooklyn, según los medios y las redes

David Beckham ha querido celebrar sus 50 años por todo lo alto. En lugar de una única fiesta, en las últimas semanas el exfutbolista y empresario ha organizado diferentes celebraciones en las que ha reunido a familiares y amigos (entre los cuales, por supuesto, destacan numerosas celebrities). Tras un evento por adelantado celebrado en abril en Miami —con Messi o Tom Brady—, después hubo una reunión en la casa de campo de los Cotswolds y una cena en París, y preparó un gran festejo el pasado 3 de mayo, el día después de su cumpleaños, en el exclusivo restaurante Core by Clare Smyth de Londres —con invitados como Tom Cruise, Ana de Armas, Eva Longoria y Guy Ritchie—. Pero en todas estas reuniones ha habido una sonada ausencia que no ha dejado de ocupar titulares, empañando así las celebraciones. Su hijo Brooklyn Beckham y su mujer, Nicola Peltz, no han estado presentes en ninguna de ellas, y las teorías sobre por qué el primogénito del matrimonio no se ha dejado ver no paran de crecer.

¿Hay un distanciamiento entre ellos? Aunque ninguno de los protagonistas se ha pronunciado tras los innumerables artículos publicados en medios de todo el mundo con fuentes anónimas que hablan de un enfrentamiento, es un hecho que algo ocurre en la familia. No solo ha llamado la atención la ausencia de Brooklyn en las celebraciones —por esas fechas estaba en Londres—, también lo ha hecho la falta de felicitaciones públicas tanto en el cumpleaños de su padre como en el de Victoria Beckham, el pasado 17 de abril. Tanto él como Peltz han hecho de las redes sociales su negocio, su escaparate publicitario y su diario personal, de ahí que, en una época en la que si algo no es público parece que no ha ocurrido, se cuestionen los motivos y sus silencios. Además, la última imagen de él con sus padres es de las pasadas Navidades, hace cinco meses. Desde entonces, ni rastro de sus encuentros.

El primogénito de David y Victoria Beckham, de 26 años, fue el primero de sus cuatro hijos en contraer matrimonio —en abril de 2022—, el primero en abandonar el nido familiar y el primero en intentar construir su camino, primero como fotógrafo y luego en el mundo de la gastronomía. Videorecetas cuestionables a un lado, en septiembre de 2024 lanzó al mercado Cloud 23, una línea de salsas picantes premium; un proyecto que presentó el pasado octubre en Los Ángeles, y ahí sí estuvo su familia para apoyarle.

Hay quienes se remontan tres años atrás para entender el posible inicio de esta ruptura familiar. Concretamente, a los preparativos del enlace que unió en matrimonio a Brookyln y Nicola. En la ceremonia, que reunió a 300 invitados en Palm Beach (Florida), la actriz y heredera del multimillonario financiero Nelson Peltz escogió un vestido de novia diseñado por Pierpaolo Piccioli, entonces director creativo de Valentino. Una elección que sorprendió teniendo en cuenta que Victoria Beckham, madre del novio, es diseñadora de moda y el resto de sus nueras lucen constantemente modelos de la exmiembro de las Spice Girl.

Después de la boda, suegra y nuera han protagonizado cariñosos posados en familia, y a solas. Pero desde que se dieron el “sí, quiero”, la presencia de Brooklyn y su esposa en reuniones familiares se ha vuelto cada vez menos frecuente. El matrimonio hizo las maletas y se mudó a Los Ángeles, lejos de Miami y Londres —las dos ciudades donde reparten su vida los Beckham—. En una entrevista de Peltz con Tatler posterior al enlace, no se mostró muy entusiasmada con la idea de mudarse cerca de los Beckham: “Diría que no, pero nunca se sabe”.

Pero Nicola Peltz no solo es la protagonista en esta teoría sobre el enfrentamiento familiar. En las últimas semanas, medios como TMZ aseguran que ha habido una discusión entre Brooklyn y su hermano Romeo, de 22 años. ¿El motivo? El nuevo romance de Romeo con Kim Turnbull, que ya habría mantenido una breve relación con el mayor de los hermanos en el pasado. Una afirmación que el implicado no tardó en desmentir a través de los comentarios de una publicación de su Instagram: “Brooklyn y Kim nunca salieron juntos”. Y, pese a todo, medios británicos como Daily Mail han asegurado en historias que desprenden un tufo misógino que los celos de Peltz y la guerra entre las cuñadas sería el detonante de este distanciamiento: “Romeo y sus padres están muy molestos porque, al parecer, Nicola está usando a Kim como pretexto para iniciar la ruptura”.

Prácticamente, toda la prensa centrada en famosos se está volcando con la historia, en especial los medios británicos. “Esta es la peor pesadilla de Victoria. La idea de que alguno de sus hijos se pelee le quita el sueño”, afirmó una fuente cercana al matrimonio Beckham a The Sun. “David está completamente destrozado. Fue como una puñalada en el corazón. Él y Victoria esperaban hasta el último momento que Brooklyn cambiará de opinión y acudiera [a su cumpleaños]”, explicaba otra en el Daily Mirror. El estadounidense Page Six contactó con otro informador: “David y Victoria solo quieren que Brooklyn recuerde quién es, porque este comportamiento no es propio de él ni refleja cómo lo criaron”. Y así una infinidad de declaraciones —incluidas las de un expeluquero del futbolista— que confirman que algo pasa, aunque ningún medio parece ponerse de acuerdo sobre el motivo real ni sus fuentes son conocidas o de cercanía con los protagonistas.

Otra teoría, la menos dramática, es que Nicola está embarazada y no quiere ser fotografiada antes de dar la noticia, hasta asegurarse de que todo vaya según lo previsto. Por ejemplo, la pareja tampoco estuvo presente en la mediática gala del Met del pasado 5 de mayo, evento en el que son fijos desde hace años.

A las decenas de artículos se suman los comentarios de los usuarios de redes sociales, que en cada publicación encuentran —o creen encontrar— una indirecta o una señal que pueda demostrar que todas estas teorías son ciertas. “Creando recuerdos especiales con familia y amigos. Os queremos a todos”, fue el mensaje de la diseñadora en su cuenta de Instagram, donde acumula 32,9 millones de seguidores, con motivo de una de las celebraciones del cumpleaños de su marido. Lo acompañó con instantáneas familiares, y en el post hay una pregunta que se repite con frecuencia: “¿Dónde está Brooklyn?”.

Los internautas están a la caza de cualquier detalle que confirme el enfrentamiento. Un ejemplo: el pasado 5 de abril, Peltz comentó con un “So beautiful Mia” (seguido de un corazón rosa y un emoji de estrellas) una publicación de Instagram de Mia Regan, exnovia de Romeo Beckham. Dos días después, Cruz Beckham escribió lo mismo (cambiando el nombre de Mia por Romeo) en una publicación de su hermano, que le respondió con dos caritas de risa. La conclusión en redes: ambos se están burlando de su cuñada.

También hay quien se atreve a comparar la historia del primogénito de los Beckham y Nicola con la de Enrique de Inglaterra y Meghan Markle. Y no solo lo han hecho los usuarios de Instagram, también medios británicos como The Times o el Daily Mail. “Meghan y Nicola son tan despiadadas que han arrancado a los débiles hijos varones Enrique y Brooklyn de sus familias”, es el titular utilizado por el segundo, de nuevo con una clara comparación machista y colocando a las mujeres recién llegadas como las malvadas del cuento. Relacionan la imagen del aniversario del exfutbolista con sus tres hijos y su mujer con la protagonizada por la familia real británica en el balcón del palacio de Buckingham con motivo del día de la Victoria el pasado lunes. Dos apariciones públicas en las que hay marcadas ausencias y tras las que se esconden historias públicamente analizadas que parecen no afectar a sus miembros.

Sea cual sea la situación real en los Beckham, esta polémica familiar llega cuando ya está en proceso la producción del documental que protagonizará Victoria Beckham y con el que sigue los pasos de la exitosa docuserie de su marido emitida en Netflix en 2023. Habrá que esperar a su estreno, todavía sin fecha, para saber cuál es la participación del hijo mayor del matrimonio y su mujer y si este evidente distanciamiento ocupa parte del relato.