Una ensalada tibia que combina diferentes coles cocinadas al punto con un aliño alegre, picatostes caseros, albahaca y una cebolla morada que pierde fuerza al combinarse con las verduras calientes.

La tortilla típica italiana es muy versátil: puedes ponerle la verdura que quieras o tengas a mano. En este caso hemos utilizado puerros y espárragos trigueros

Un caldo con tomate reducido sirve como base a esta sopa, que se viene arriba gracias a un huevo escalfado y una verdura cortada en daditos y cocinada al dente.

Crema de brócoli y lentejas rojas, ragú de cordero y azafrán, merluza pochada con verduras agridulces o felipes de Fornos: no, no es un sueño, es la comida de la próxima semana.

Un sencillo cambio para la salsa pesto clásica la convierte en un acompañamiento fresco para verduras y carnes: añadir un poco de piña con su punto ácido y a la vez dulce.

Nadie diría que hacer un arroz con verduras de temporada que quede sabroso y con melosidad es fácil, pero te aseguramos que lo es, y mucho más de lo que parece.

Preparamos esta verdura a fuego alegre, con aceite de oliva virgen extra y algunas especias y la acompañamos de un paté de alubias con perejil y tahini (sí, como si fuera hummus)

Después de leer esta guía, no va a haber rebozado –clásico, creativo, con hierbas, especias o semillas, con huevo o sin él, con carne, verdura o pescado como base– que se te resista.

La untuosidad de la mantequilla y la potencia de sabor del miso hacen que la combinación de ambos sea una deliciosa bomba que queda especialmente bien con platos de pescado, verdura o tubérculos.

El potaje alicantino tradicional se adapta a las verduras que ofrecen la zona y la temporada, y se enriquece con legumbres o con carnes. También se remata con arroz o trigo tierno.

Hacer que esta verdura quede crujiente al horno es más fácil de lo que crees, y si lo acompañas de una salsa de cacahuete y sésamo consigues un entrante ideal