Ese vino que nunca falla, ni en la mesa ni en los concursos

Es una escena habitual, en cualquier restaurante: llega la carta de vinos, y esa persona de la mesa a la que asignan la responsabilidad de elegir la armonía en la copa, exclama: “Marqués de Cáceres, que nunca falla”. No le falta razón. Desde sus orígenes, hace más de medio siglo, la bodega riojana ha hecho de la excelencia su sello distintivo. Una filosofía que le ha llevado a consolidarse como un referente dentro y fuera de España.

Cada vendimia, cada botella, cada decisión tomada, ha sido un paso más en su búsqueda incansable de la calidad y la singularidad de sus vinos en esta meca de la Rioja Alta.

El sello acaba de recibir un nuevo reconocimiento, el de la web y revista Drinks international. El puesto 18 de esa cotizada lista refuerza la posición de Bodegas Marques de Cáceres como una marca que ofrece vinos de alto valor en todos sus segmentos de consumo. Desde sus vinos Genuinos hasta sus Signature, se presentan como una opción acertada y de confianza para quienes buscan lo mejor sin complicaciones. Los que nunca fallan.

Vinos que hablan por sí mismos

En el universo enológico, donde las tendencias cambian, donde los consumidores que más saben evolucionan y buscan autenticidad, la marca sigue fiel a su principio más esencial: hacer vinos que hablen por sí mismos y garanticen el sabor que les gusta.

Este prestigioso galardón, otorgado por expertos, sumilleres y profesionales del sector, llega en un momento clave: un punto de inflexión en el que la marca ha abierto sus puertas a nuevas generaciones de consumidores con un lenguaje más cercano, más directo, más suyo, pero manteniendo intacto su legado.

Hoy, sin renunciar a su esencia, también quiere hablar el lenguaje de quienes disfrutan del vino sin reglas, sin normas rígidas, sin miedo a explorar. Reafirmando el derecho a que cada uno disfrute de la vida -y del vino- a su manera.

“Este reconocimiento es un honor, pero sobre todo es un impulso para seguir adelante. Para nosotros, la calidad es innegociable, pero también sabemos que el vino es disfrute, es compartir, es celebrar”, aseguran desde la bodega de Cenicero (La Rioja). “Queremos seguir ofreciendo lo mejor, pero con una visión más actual, más natural, más cercana a quienes ya nos eligen y a quienes están por descubrirnos. Porque ser una de las marcas más admiradas del mundo no es solo un reconocimiento. Es una invitación a seguir creciendo, innovando, sorprendiendo”.

Siempre hay que ir un paso por delante con la humildad de cuestionarse cómo mejorar. Tengo la suerte de que todos remamos en la misma dirección: con la excelencia como meta

Fernando Costa, uno de los cien mejores enólogos del mundo, según la revista 'The Drink Business'

Premio al experto

No es el único motivo para celebrar que tienen en Bodegas Marqués de Cáceres. El enólogo Fernando Costa ha sido reconocido por la revista The Drink Business entre los cien mejores del mundo de este año en su guía de referencia The Master Winemaker TOP100.

El reputado master of wine Patrick Schmitt, director de The Global Wine Masters, está al frente del exigente panel de expertos del más alto nivel profesional (entre los que se encuentran reconocidos masters of wine, masters sommerlies y periodistas especializados) que se reúne cada año para catar a ciegas más de 3.000 muestras de vino provenientes de las principales regiones vitivinícolas del mundo.

El listado de los cien mejores fue presentado en febrero en la feria internacional Wine Paris Vinexpo (Francia), una cita anual ineludible. En el Gaudium, icónico tinto de Bodegas Marqués de Cáceres, volvió a recaer el máximo galardón en la cata a ciegas del Concurso Global Rioja Master, otorgado a los vinos de calidad excepcional, carácter distintivo y una expresión única del terroir.

El reconocimiento a la labor de Fernando Costa, al frente de un completo equipo de enólogos en la compañía vitivinícola, acentúa la estrategia de innovación constante que caracteriza a la bodega desde sus orígenes. “Siempre hay que ir un paso por delante con la humildad de cuestionarse cómo mejorar”, afirma Costa. Un reto que, además, comparte con su equipo: “Tengo la suerte de que todos remamos en la misma dirección: la excelencia como meta”, concluye.