SOSTENIBILIDAD
Otro turismo es posible: el camino para dejar de ver a España como simple destino de ‘sol y playa’

El turismo es el principal motor de la economía española, pero su auge incesante ya ha dejado heridas profundas en algunos lugares:
- Canarias, San Sebastián, Barcelona o Granada han sido escenario de protestas multitudinarias.
- Y hay cifras abrumadoras: solo Tenerife recibe al año 7,2 millones de visitantes, un millón más que todo Brasil.
¿Existe otra forma de turismo? Sí y, de hecho, los visitantes reclaman cada vez más experiencias auténticas lejos de la masificación:
- El gasto turístico ha crecido un 51% en el norte y el interior.
- El turismo gastronómico y cultural ha subido más de un 30% frente al 7% de sol y playa.
- Y las administraciones, arropadas por los fondos europeos, ven la España del interior como un motor de desarrollo económico.
¿Cómo se puede conseguir? Exprimiendo el potencial de cada región, poniendo en valor su patrimonio histórico o natural. Y ya hay ejemplos de ello:
- En Martos, un pequeño pueblo de Jaén, se construyó en 2021 uno de los primeros miradores astronómicos de la comarca con una subvención de la Diputación.
- Ahora este astroturismo está creciendo gracias a empresas que alquilar bicicletas, los alojamientos para ver estrellas...
- Y se ha hecho bandera de ello en vídeos promocionales, ferias y discursos políticos.
- El resultado es un turismo sostenible, desestacionalizado y con empleo y emprendimiento de calidad.
¿Y no se pueden masificar también estos lugares? De momento, no existe ese temor: la clave de este turismo es poner en valor todo un territorio, no solo un único destino.
- Solo así podrán coexistir en equilibrio con el territorio y la sociedad que habita en él.
©Foto: Vicens Giménez