Cuatro detenidos por una presunta agresión sexual a una mujer en la playa de la Barceloneta

La policía ha detenido a cuatro hombres en la madrugada de este viernes al sábado por presuntamente agredir sexualmente a una mujer en la playa de la Barceloneta de Barcelona, según informan los Mossos d’Esquadra. El caso ha tenido lugar sobre las tres y media de la madrugada cuando un testigo de los hechos ha avisado a la policía local de que estaba viendo cómo se producía una agresión a una mujer en la arena. En la detención ha participado la Guardia Urbana y la víctima ha sido trasladada a un centro hospitalario. Los Mossos, inicialmente, investigan este caso como agresión sexual, pero no como una violación grupal. Los efectivos de un vehículo de la Guardia Urbana que se encontraban por la zona se han acercado hasta el lugar indicado por un testigo, donde estaban los cuatro jóvenes y la víctima. Los agentes han detenido a los hombres y han auxiliado a la mujer en la arena, adulta y de nacionalidad española, quien presentaba signos de haber sido drogada.

El pasado enero tres personas fueron detenidas también por una presunta agresión sexual en grupo en Barcelona, esta vez en el barrio de Les Corts. La policía catalana recibió el aviso alrededor de las 08.00 de la mañana. La presunta víctima, una mujer de la misma edad de los acusados, de entre 18 y 22 años, explicó a los Mossos que había accedido a ir al domicilio para mantener relaciones sexuales consentidas con uno de los hombres. Una vez dentro del inmueble fue asaltada por los otros dos chicos y obligada a mantener relaciones sexuales con los tres contra su voluntad.

Los delitos sexuales han crecido un 125% en la última década en Cataluña. Las cifras dibujan una curva ascendente desde 2014, cuando se denunciaron 1.694 casos, hasta los 3.822 del año pasado, según datos consultados por EL PAÍS. En los delitos contra la libertad sexual se incluye una gradación de casos, que van desde el exhibicionismo a conductas más graves de acoso sexual, o agresión, hasta llegar a las violaciones, que son la mitad de los casos. Fuentes policiales atribuyen el crecimiento a una mayor sensibilización, que permite que se denuncien conductas que antes no acababan en comisaría.