La Generalitat evaluará el teletrabajo de los funcionarios

Los funcionarios de la Generalitat que decidan acogerse a la modalidad de teletrabajo (con un máximo de dos jornadas completas fuera de la oficina) tendrán que pasar una evaluación periódica para medir el cumplimiento de objetivos. Es una de las condiciones fijadas en un decreto aprobado este martes por el Govern y que busca regular esta forma de trabajo. Cada trabajador tendrá un plan personalizado y además habrá algunos supuestos en los que se permitirá el trabajo a distancia de manera generalizada, por ejemplo, los episodios de alta contaminación.

Los trabajadores de los departamentos localizados en el nuevo distrito administrativo de la Generalitat, en la Zona Franca de Barcelona, tendrán un régimen especial y en su caso podrán solicitar una jornada más de teletrabajo, para así llegar a un total de tres.

Cada funcionario podrá decidir si se acoge a la posibilidad de trabajar de manera remota, por un periodo máximo de un año, prorrogable. Se le diseñará un plan específico de desempeño, que será revisado de manera periódica con su superior jerárquico para determinar “el cumplimiento de los objetivos y las condiciones pactadas en el plan personal”.

Además de ese plan específico, el decreto establece la posibilidad de teletrabajar en tres supuestos: completar la jornada laboral cuando se está en un servicio fuera del despacho y “el desplazamiento resulta ineficiente”; encargos concretos derivados de situaciones de emergencia o episodios de alta contaminación.

El decreto aplica para un total de 40.000 trabajadores de la Generalitat y sus organismos autónomos, si bien no cubre algunos puestos específicos como los mossos (tienen sus acuerdos específicos), docentes, personal de atención directa al público, servicios penitenciarios o bomberos.

Los trabajadores que quieran optar por esta manera de cumplir con su jornada laboral también tendrán que recibir una formación específica sobre ciberseguridad, protección de datos, prevención de riesgos laborales y seguimiento de objetivos en la Escuela de Administración Pública de Cataluña (EAPC).

La Generalitat espera que con esta flexibilidad laboral se pueda aumentar la productividad y además haya ahorros, por ejemplo, en consumo energético, según una nota de prensa. Antes de la llegada de la pandemia del coronavirus, la Administración catalana ya venía desarrollando un plan de teletrabajo y ya se contemplaba en casos específicos, como por ejemplo la reincorporación progresiva de funcionarios convalecientes de enfermedades graves.