Las dificultades del centauro


Parecería que el objeto de esta macrourbanización china sería el de señalar a sus usuarios que son tan intercambiables como las viviendas que habitan. El hormiguero mata la personalidad, y por ahí va la cosa. El drama de los seres humanos es el de haber evolucionado como individuos por un lado y como seres sociales por el otro, aunque sin haber dado con la fórmula capaz de articular ambas peculiaridades. Ante ese problema de costura, hay sociedades que eligen el individualismo feroz o la masificación total.
Comparen este monstruoso complejo inmobiliario, pongamos por caso, con la bella Manhattan, donde cada edificio conserva su singularidad, su individualidad, podríamos decir, su idiosincrasia. Pero es el peso de esa singularidad lo que, según hemos leído hace poco, la está literalmente hundiendo en la tierra como Venecia se hunde en el agua. Lejos de calcular en su día las toneladas de acero y hormigón que el suelo de la isla neoyorquina podría soportar, cada constructor fue a lo suyo, que suele ser lo de nadie, y el resultado final es su naufragio.
La inmobiliaria china que puso en pie la animalada de la foto también se ha hundido, económicamente en este caso, víctima de sus contradicciones financieras. Significa que no tenemos remedio ni solos ni acompañados. La mezcla deseable de aislamiento egoísta y congregación solidaria está resultando más difícil de lo esperado, en el supuesto de que alguien espere algo de esta pobre humanidad. Somos capaces de imaginar un centauro, pero inhábiles para diseñar una sociedad lo suficientemente mixta como para vivir en paz.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma

Más información
Archivado En
Últimas noticias
Siete claves políticas de una elección rotunda: 16 puntos de diferencia entre Kast y Jara
“¡El que no salta es zurdo!”: partidarios de Kast celebran el triunfo del candidato de las derechas
¡La suerte estaba echada! Resultados y proyecciones tras la segunda vuelta presidencial
Kast modera las expectativas en su primer discurso como presidente electo: “Los resultados no se verán al día siguiente”
Lo más visto
- Sin duchas ni camas adecuadas, y con obras en marcha: así estrenaron 30 niños extranjeros el centro de acogida de La Cantueña de Ayuso
- Guardiola elimina la prohibición de que los jefes de servicio de la sanidad pública ejerzan en la privada y sube un 59% la derivación de pruebas
- El “canibalismo interno” se extiende en el PSOE a la espera del día después de Sánchez
- El Ayuntamiento de Valencia y el Levante piden a LaLiga aplazar el partido contra el Villarreal por las fuertes lluvias
- El hombre que desarmó a uno de los atacantes en Sídney es aclamado como un héroe en Australia






























































