Maniobras arriesgadas

El Brexit y el procés nos están mostrando los peligros de salirse de la realidad mediante distorsiones cognitivas que crean un mundo de fantasía. Los que entran en ese mundo irreal necesitan que otros también lo hagan para sentir la seguridad que da la compañía, y su proselitismo es creciente. Aumenta, por consiguiente, la exaltación de sentimientos y emociones propiciadoras del menosprecio de la racionalidad y de la vida normal, y el abandono de anclajes con la realidad, a la que, sin embargo, tarde o temprano se tendrá que volver.

Y esa vuelta a la realidad será tanto más dura cuanto más alejado de la realidad sea el cuadro sustitutivo que se haya estado pintando.

Es de temer que vamos a ver bastante gente colgada de la brocha cuando desaparezca la escalera a la se ha subido para pintar su engañoso cuadro.

Jesús Zandueta Vera

Madrid