Deber de neutralidad
Los militares tienen limitado su derecho a la libertad de expresión porque deben estar por encima de cualquier ideología

Uno de los principios fundamentales de una sociedad democrática es el de ceder el monopolio de la fuerza a los cuerpos encargados de la protección de los ciudadanos y de la defensa del Estado. Por este motivo, los militares tienen limitado el derecho a la libertad de expresión, desarrollado después en una ley orgánica. Limitada no quiere decir suprimida, pero sí deben cumplir con un deber de "neutralidad política y sindical" por el que, según el texto legal, "el militar no podrá pronunciarse públicamente ni efectuar propaganda a favor de opciones políticas". Deben servir a todos los ciudadanos y a cualquier Gobierno por encima de su credo o ideología.
Este principio es incompatible con el manifiesto que bajo un rimbombante título —Declaración de respeto y desagravio al general don Francisco Franco Bahamonde, soldado de España— alberga una nada disimulada defensa del dictador. Ya lo han firmado 700 militares o exmilitares. Cinco de ellos están siendo investigados por el Ministerio de Defensa porque están en la reserva: han dejado el servicio activo, pero forman parte de las Fuerzas Armadas y, por lo tanto, están sometidos a la misma disciplina que sus compañeros. Un cabo en activo también está siendo investigado por su adhesión a un manifiesto contrario.
Los militares jubilados que mostraron su apoyo a Franco tienen, en cambio, el mismo derecho a la libertad de expresión que cualquier otro ciudadano. Pero desde el momento en que ponen junto a su nombre el rango que ocupaban deberían estar obligados a mantener su neutralidad, sino legal sí moralmente. En las últimas décadas, el Ejército se ha convertido en una de las instituciones más respetadas por los españoles, tanto por su labor en misiones internacionales como por su escrupulosa defensa de los principios democráticos, entre ellos la neutralidad política. Una desafortunada carta no debería empañar este legado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Cristian Portilla, el candidato apoyado por la ultraderecha, será el nuevo alcalde de Bucaramanga
Resultados de las elecciones presidenciales de Chile 2025, en vivo | Marco Rubio felicita a Kast: “Estados Unidos espera colaborar con su Administración”
García Harfuch niega los vínculos entre el presunto extorsionador Limones y el sindicato del morenista Pedro Haces
Líderes ultra y de la derecha americana celebran el triunfo de Kast: “Un paso más en defensa de la libertad y la propiedad privada”
Lo más visto
- Sin duchas ni camas adecuadas, y con obras en marcha: así estrenaron 30 niños extranjeros el centro de acogida de La Cantueña de Ayuso
- Guardiola elimina la prohibición de que los jefes de servicio de la sanidad pública ejerzan en la privada y sube un 59% la derivación de pruebas
- El “canibalismo interno” se extiende en el PSOE a la espera del día después de Sánchez
- El Ayuntamiento de Valencia y el Levante piden a LaLiga aplazar el partido contra el Villarreal por las fuertes lluvias
- El hombre que desarmó a uno de los atacantes en Sídney es aclamado como un héroe en Australia




























































