El argumento de esta serie, mostrar cómo son las mujeres cuando no se sienten observadas, surgió del desafío que inició la autora en abril de 2015. "Se trataba de pasar un año dibujando algo cada día, por muy pequeña que fuese la ilustración. Cuando te enfrentas a un proyecto de este tipo, encontrar a diario algo interesante sobre lo que poner el foco puede resultar muy complicado. Y así fue como mi rutina se convirtió en una fuente de inspiración para mí”.Nixon reivindica los hábitos, quizás nimios o casi imperceptibles, que llevamos a cabo cuando no estamos en compañía (lavarnos los dientes, mirar el móvil, comer, ir al baño) y nos causan bienestar. “Todo el mundo se comporta de manera diferente si está solo. Poder hacerlo y contar con este espacio es fundamental para nosotros”.La autora asegura que cuando nadie nos mira todos somos menos prudentes: "No creo que sea algo que solo nos ocurre a las mujeres; también los hombres actúan de manera diferente cuando nadie los ve. Personalmente, no pienso que las mujeres se escondan de nada”.Esta artista se aleja de la fantasía y plasma en el papel todo aquello que puede tocar con sus propias manos. “El motivo que me llevó a dibujar estas escenas tan comunes para todos nosotros es que, de manera frecuente, las pasamos por alto. Son aspectos mundanos de nuestra existencia que no resultan interesantes. Mi intención era elevar todas estas acciones y convertirlas en algo bonito e interesante. Es importante que cada cierto tiempo nos paremos y dediquemos unos segundos a apreciarlas porque, aunque suelen resultar invisibles para nosotros, creo que podemos encontrar belleza en ellas”.La obra se inspira en su forma de entender la vida y es casi inseparable de su realidad. “Creo que todos mis dibujos contienen una pequeña parte de mi personalidad. Yo soy una chica, así que es esa la perspectiva que me ha tocado vivir y la que proyecto en mi trabajo. Además, tengo muchas referencias certeras acerca de lo que las mujeres hacen cuando están solas y por eso resulta más sencillo dibujarlo".En sus ilustraciones conviven referencias culturales como Dolly Parton o Lena Dunham con elementos terrenales como refrescos de soda o medias de licra. “Estos detalles para mí resultan fundamentales porque te ayudan a contar una historia con solo una imagen. Si incluyo objetos específicos o hago alusiones a motivos que todos podemos compartir, para el espectador resulta más sencillo imaginar quién es la chica que están viendo. Si dibujo a alguien rodeada de libros pero no incluyo títulos específicos, no estaría diciendo demasiado acerca de ella, solo que lee mucho o que es algo desordenada. Pero si está leyendo a Amy Poehler y Tina Fey [actrices cómicas estadounidenses], su personalidad resultará evidente”, concluye Sally Nixon.
