Baleària gana un 37% menos y lo achaca a la guerra comercial y al precio del combustible

Los beneficios de la compañía de transporte marítimo Baleària se redujeron un 37% en 2018, hasta los 27,5 millones de euros. Su presidente, Adolfo Utor, ha atribuido este miércoles la caída a la "guerra comercial" de intensidad "salvaje" que está librando con su principal competidor, Armas, que el año pasado adquirió Transmediterránea. Y al aumento del precio del combustible, que representa más de una cuarta parte de coste de la empresa.

El mal resultado de 2018 de la empresa valenciana se ha producido a pesar del crecimiento en tráfico de pasajeros (11%, hasta los 4,3 millones), vehículos (17%, hasta superar ligeramente el millón) y mercancías (3,5%, 5,8 millones de metros lineales de carga). Y de que la facturación en su conjunto ha aumentado un 5%, hasta los 381,4 millones de euros.

El motivo de ello, ha explicado Utor durante la presentación de resultados en la sede de la compañía, en el puerto de Dénia, es que la competencia es feroz y empuja con fuerza los precios a la baja.

La guerra comercial tiene dos focos principales. Por un lado Canarias, la comunidad donde está radicada el Grupo Naviero Armas, donde Baleària ha empezado a operar con una línea desde Huelva de la mano de su socio Fred Olsen. Utor ha admitido que en esta línea Baleària está registrando pérdidas millonarias "de dos dígitos", pero con las que contaban. Y que la apertura de nuevos mercados en el transporte marítimo suele exigir tres años de penurias antes de empezar a recoger los frutos.

El segundo punto caliente es Gandia (Valencia), donde su competidora ha reforzado sus conexiones con Baleares. A diferencia de Dénia, Gandia cuenta con conexión ferroviaria con Madrid.