Al menos nueve comunidades incumplirán el déficit de 2014

El déficit público --la diferencia entre gastos e ingresos-- del conjunto de las administraciones ascendió en noviembre del año pasado a 49.896 millones de euros, lo que representa unos números rojos equivalente al 4,62% del PIB. Este dato no tiene en cuenta a los Ayuntamientos, que suelen presentar un ligero superávit, por lo que allana el camino para que España cumpla con el objetivo de déficit fijado por Bruselas para 2014, en el 5,5% del PIB. A finales de marzo se conocerá el dato de cierre del conjunto de Administraciones Públicas, según las previsiones del Ministerio de Hacienda.

"Estas cifras excluyen las ayudas financieras contabilizadas hasta finales de noviembre, que no se computan a efectos del cumplimiento del objetivo de estabilidad, y ascendieron a 767 millones, un 0,07% del PIB, señala el Ministerio de Hacienda en una nota.

Un vistazo en profundidad a las cifras de déficit revela que al menos nueve comunidades incumplirán el objetivo de déficit regional fijado para 2014, en el 1% del PIB. En noviembre, Andalucía (1,73%), Aragón (1,41%), Baleares (1,21%), Castilla-La Mancha (1,40%), Cataluña (1,95%), Extremadura (2,45%), Madrid (1,25%), Murcia (2,54%), y Comunidad Valenciana (1,87%) superaron con creces el límite anual. Con estos registros, el agujero presupuestario del conjunto de las comunidades ascendió a finales de noviembre al 1,37% del PIB, lejos del 1% que tenía como meta. Además, en el último tramo del año es cuando más difícil tienen los Gobiernos regionales de controlar el gasto, según la serie estadística. El Ejecutivo asume que las administraciones regionales incumplirán el objetivo pero han reservado un buen colchón por parte del Estado para absorber esta desviación.

A pesar de esta pequeña mancha, el optimismo se ha disparado en el Gobierno por el buen dato del conjunto de administraciones. El secretario de Estado de Economía, Iñigo Fernández de Mesa, ha señalado este martes que el déficit de 2014 será inferior al objetivo inicial del 5,8% del PIB, aunque este límite se revisó posteriormente para bajarlo al 5.5%. Esta evolución de las cuentas públicas refleja, además de los ajustes realizados (recortes del gasto público que se refleja en la sanidad y la educación así como subidas de impuestos) que el déficit público es una magnitud muy elástica: cuando la economía está deprimida se desboca con facilidad y cuando se recupera la actividad se contrae. El año pasado cerró con un crecimiento de la economía del 1,4%.